Desde sus reductos o refugios, escondidos o agazapados, todos de la oposición, emprenden, ahora sí, una guerra sin cuartel, según vergonzoso pacto, “ganarle o tumbar a la brava al correísmo”, ya no importan ideologías, principios, planes de gobierno, sino recuperar espacios en la conducción del Estado y continuar como lo han practicado siempre, la voraz rapiña, el enriquecimiento ilícito, la evasión de impuestos, acumulación de dinero en los paraísos fiscales o infernales y cuantas otras mañoserías con la garantía del supuesto retorno a la era del atraco o restauración conservadora. Los contrarios movilizados a la deriva en la pendiente de una peligrosa encrucijada preelectoral, sin presidenciable único y como se sienten derrotados por el poder y firmeza de Alianza País y Frente Unidos, se alinean, nuevamente, en las acciones de violencia callejera, en busca de un muerto, para crear un estado de turbulencia en el país, proclive a un golpe desestabilizador del régimen Socialista Siglo XXI.
El extinto MPD y la sucursal UNE, con otro membrete; el excombatiente FUT y seudoizquierdistas envejecidos por la ambición, anuncian en tono de amenaza, tomarse las calles, sin sentido y argumentos y solo para proclamar “presente”, aquí estamos en la contienda electoral y exhiben como plataforma, rechazar la política gubernamental y fortalecer sus aspiraciones, de llegar por lo menos, a las puertas de la Asamblea. Como carecen de apoyo popular para entrar a la competencia, pretenden, como todos de la oposición “tumbar definitivamente al correísmo” y con ello frenar el proceso de reivindicación social.
En esa misma línea, el candidato de CREO, se convierte en bravucón y a grito reclama como de su propiedad la centroderecha, si ya los ecuatorianos lo han ubicado en el sitial hegemónico de la bancocracia y su escondite en el paraíso. Con gestos de un desesperado, imitando a otro, vocifera, ahora van a conocer al verdadero Guillermo, el que va a gobernar desde mayo de 2017. Como se siente solo, grita, sin programa de gobierno factible, pero eso sí cargado de “carajos”.
El Prian, pretende resucitar con ‘Adelante Ecuador Adelante’, simplemente para estorbar el proceso electoral. El empresario millonario, consuetudinario perdedor, añorando los 5 fracasos, dice, ahora, estar dispuesto a deponer su candidatura para afianzar diálogos en busca de la renovación y poner fin al continuismo. Nadie le hace caso, ni lo toma en cuenta, solo cierta prensa privada le abre las páginas para cubrir espacios vacíos.
Otros sectores políticos alineados en la oposición, incluidos los socialcristianos, se movilizan, ofrecen concesiones, llaman a la unidad, sin considerar ideologías, pero con la promesa de cerrarle el paso al presidenciable de Alianza País y Frente Unidos. En el fondo todos los contrarios, sí se unen, pero en la decisión por lesionar la imagen del gran líder Rafael Correa Delgado y derribar el régimen del Buen Vivir.
El candidato de la Revolución Ciudadana y sus aliados exhibirá el plan nacional en armonía con los postulados del socialismo siglo XXI, que en síntesis abarca, mejoramiento de las condiciones de vida de los olvidados, creación de más plazas de empleo, afianzar la seguridad, fortalecer la soberanía, el rescate de la moral y continuar con el proceso de cambio en el orden social y económico, coherente con las necesidades del pueblo y la patria. (O)