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El Telégrafo
Rosalía Arteaga Serrano

Oportunidad para lo alternativo

12 de abril de 2022

Es un reconocido lugar común mencionar que las crisis generan oportunidades, lo complejo es que esto se transforme en realidad, para que de las palabras pasemos a las acciones.

 

Desde el 2020 hemos vivido como humanidad, una crisis tras otra, primero fue la pandemia, que todavía no nos deja, que trajo aparejadas, desde el punto de vista económico una serie de problemas como el declive de las economías, del turismo, además de las dolorosas pérdidas humanas, así como también la denominada crisis de los contenedores, que conflictúan el comercio mundial. Luego el desatarse de la guerra de Ucrania, con la invasión de Rusia, que ha causado problemas humanitarios y económicos, como lo que está ocurriendo ahora con los precios de los combustibles, como consecuencia del bloqueo al petróleo y gas rusos y el paro forzado de la producción ucraniana.

 

Estos son algunos de los problemas que enfrentamos, porque no entraremos en detalles sobre la escasez de trigo y de aceite que causan preocupación, subida de precios, búsqueda de alternativas.

 

El tema de los combustibles aparece como crucial, hemos visto ya elevarse a cifras muy altas a la gasolina, al diésel, al gas, lo que incide en los precios del transporte terrestre, fluvial, marítimo, aéreo, así como el costo de la calefacción, de la cuenta de consumo eléctrico, entre otros.

 

Todo ello configura un panorama nada alentador para el comercio mundial y sobre todo para la calidad de la vida de la gente, que tiene que enfrentar precios exorbitantes, carestía y desaparición de ciertos productos que antes eran asequibles, pero que ahora se vuelven inalcanzables.

 

Todo ello configura un escenario propicio para la creatividad humana en el desarrollo y diseminación de las energías alternativas, aquellas que no dependen de los combustibles fósiles, sino que se basan en la utilización de fuentes como el viento, el sol, los oleajes, lo geotérmico, la transformación de los deshechos. Estos elementos pueden propiciar el que las energías limpias tengan un espacio preponderante y cambiemos de una vez por todas el panorama energético del planeta.

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