Los movimientos sociales son acciones colectivas mantenidas por grupos organizados de la sociedad que pretenden luchar por alguna causa social. En general, el grito que levantan los movimientos sociales representa la voz de las personas excluidas del proceso democrático, que buscan ocupar los espacios de derecho en sociedad que han sido históricamente silenciados.
Los movimientos sociales son sumamente importantes para la formación de una sociedad democrática cuando intentan posibilitar la inserción de cada vez más personas en la sociedad de derechos. Los primeros movimientos sociales tenían como objetivo solucionar los problemas de las clases sociales y políticas. Hoy en día, los movimientos sociales del mundo se basan en gran medida en pautas de identidad que representan una diversidad de categorías y que obedecen a desajustes de los sistemas que en teoría serían más igualitarios. Los movimientos sociales levantan las banderas de los grupos organizados a favor de alguna causa que equilibre el futuro de la sociedad.
La comprensión de los movimientos sociales son espacio de debate entre los pensadores de la filosofía y de la sociología que no tiene ningún consenso todavía. En este sentido ya modo de ejemplo, los sociólogos Marx, Weber y Durkheim ven en los movimientos sociales el sustento de una revolución, la institucionalización de un nuevo poder burocrático y una cohesión social aún mayor. Por otro lado, tenemos pensadores vinculados al conservadurismo, como el filósofo, sociólogo y criminólogo francés Gabriel de Tarde y el filósofo y periodista español José Ortega y Gasset, que vieron en los movimientos sociales un peligro inminente. Para este grupo, los movimientos sociales, como movimientos de masas, tienden a seguir caminos irracionales que perturban el orden vigente.
Las diferencias son varias en el análisis de los movimientos sociales, pero hay un acuerdo en que son la concreción de las tensiones sociales y la ruptura inminente de un cambio social con consecuencias en todos los órdenes del convivir de la población. En todo caso, es necesario darse cuenta de que existe una historia milenaria de tensiones que representan grandes movimientos sociales del mundo moderno.
Quizás el movimiento de masas más antiguo y relevante que podemos señalar como principio de movimiento social fue la Toma de la Bastilla, que marcó la Revolución Francesa en 1789 y fue responsable de la caída de la monarquía absolutista francesa y que dio pasa nuevas instituciones de los Estados occidentales y que básicamente tiene que ver con la conquista de las democracias como formas de gobierno.
En el Ecuador hemos tenido varios movientes sociales relevantes y el que destaca es la Revolución Liberal de 1895, que fue un proceso de transformación política y económica significativa y que has ahora podemos sentir sus conquistas en favor de la sociedad ecuatoriana. En mayo y junio de 1990 se produce “El levantamiento indígena” que fue el movimiento social de mayor importancia de América Latina de la época y que posesiona a la organización indígena como un actor social y político relevante para el Ecuador. La historia del país está en deuda con los movimientos de los pueblos originarios y esperamos que los gobiernos comprendan y acepten la necesidad de construir sociedades más justas e incluyentes.