La provincia de Santa Elena (PSE), ubicada al oeste del puerto de Guayaquil, está separada de la cuenca del río Guayas, por la cordillera costanera de Chongón.
Climáticamente tiene características con temperaturas promedio de 25°C y precipitaciones anuales que oscilan entre 125 a 150 mm. Su vegetación corresponde a las zonas de vida: maleza desértica y desértica de acuerdo a la clasificación ecológica de Holdridge.
La mayor restricción que tiene para su desarrollo es la limitación del recurso hídrico, constituyendo una de las regiones más secas de Ecuador. La ubicación de PSE, contigua a la Cuenca del Guayas (la mejor provista de recursos hídricos de la costa del Pacifico en América del Sur) ha permitido reducir la falta del recurso mediante el trasvase de las aguas del río Daule, potenciando su desarrollo en general y en particular la actividad agrícola capaz de mantener una producción diversificada de cultivos hortícolas y frutales de exportación cercanos a los mercados de Guayaquil (la ciudad más populosa de Ecuador), además de prestar a la ciudad espacios físicos de expansión para resolver los problemas que tiene por excesos de emigración.
Actualmente el trasvase suministra agua potable a centros poblados desde la represa de Chongón, pasando por Cerecita, Progreso, Playas, Zapotal, El Azúcar, Santa Elena, Salinas, Punta Blanca hasta San Vicente. Y en este recorrido que es el de su canal principal se ha previsto el riego de 43.000 hectáreas.
En el sector de Cerecita se puede observar sembríos de cacao, banano, y a partir de Progreso, a 70 km de Guayaquil: caña de azúcar y plantaciones de empresarios particulares de productos de exportación y de semillas certificadas. Cercanas a la carretera principal hay viñedos.
El primer tramo de riego por aspersión fue financiado por el Estado. La organización campesina de la PSE, históricamente comunera, no fue suficientemente capacitada en el manejo del proyecto Daular. Al respecto existen documentos que analizan el destino de estas inversiones, los que sería importante analizar como orientación para la administración de estos proyectos en los cuales el Estado invirtió en el riego. Y en la primera década de 2000 eximió a los empresarios del coste del agua de riego.
El sistema del proyecto, con dos estaciones de bombeo para el trasvase, túneles y largos canales de conducción el precio del agua es costoso y su valor debe financiar por lo menos la operación y mantenimiento del sistema (O&M). La interrupción del servicio acarrearía onerosas pérdidas de las inversiones realizadas para la producción y servicios para el mejoramiento de la calidad de vida de los pobladores. Además, paralelamente se debe mantener un eficiente manejo de los recursos naturales.
Actualmente se informa haber detectado la salinización del suelo en una amplia zona dotada con infraestructura de riego, lo cual significa prácticas inadecuadas de riego. (O)