Publicidad

Ecuador, 21 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo

Los cambios necesarios

12 de noviembre de 2011

Los cambios en los puestos ministeriales o de secretarías siempre son necesarios en medida de ajustar los elementos ideológico-políticos a las complejidades de la realidad social. Algunos afirman que son solo superficiales o motivados por las próximas elecciones.

Si es por las elecciones, no existe ningún impedimento político o moral que limite hacerlo, ya que si se piensa y proyecta en términos de que un proyecto se extienda en el tiempo, no hacerlo sería una carencia de estrategia política.

Ahora de los cambios producidos, se ha mencionado, en algunos medios privados, que la presencia de un antiguo socialista en la  Secretaría Nacional de Inteligencia, sería lo más destacable, sobre todo porque, según esos medios, abriría la posibilidad de articular los Comités de Defensa y todo ese cuento de que se replicaría el modelo cubano…Es claro hace tiempo que al Gobierno se le ha dificultado articularse a ciertos movimientos sociales y políticos históricos.

Es claro que ha habido grandes errores, sobre todo de funcionarios que, pasando de la militancia a la función pública, no han podido articular el discurso y la práctica de los movimientos sociales en la lógica de la reinstitucionalización del Estado.

La propia Secretaría de los Pueblos ha tenido grandes problemas en articular lo estatal con lo político-social, de ahí que el nuevo cambio que se da en su conducción es de esperar que no sea un mero instrumento de políticas públicas dirigidos a las organizaciones sociales, sobre todo desde el enunciado que es esta Secretaría la que sabría definir por dónde deben ir esas organizaciones.

En lo formal, la Secretaría tiene su sentido de existir, pero en lo operativo se reproduce una vieja práctica directiva y es de esperar que se dé un giro total en lo ideológico-político, metodológico y estratégico para posibilitar el que sea un puente entre la política estatal y lo político organizacional.

Por otro lado, es relevante el cambio en la Coordinación de la Política, este cambio era urgente. Esta Coordinación se había casi entrampado en la dinámica del quehacer de la política institucional entre las funciones del Estado, cuando bien sabemos que debe salir de lo estatal hacia el entramado complejo de las organizaciones, comunidades y toda forma política de organización social, no solamente de tipo ciudadano.

Esta Coordinación es sumamente estratégica y necesaria para recuperar los espacios de diálogo con quienes ahora el Gobierno tiene una mínima comunicación. No se trata de eliminar el conflicto como enseñó el neoliberalismo; el conflicto es vital para la diferencia y diversidad de un pueblo, por tanto, la política debe ser una constante en la lucha social por la vida; de ahí que es urgente que la política de los pueblos y nacionalidades no sea invisibilizada o judicializada por parte del Estado ciudadano. Es de esperar que los cambios sean rápidos y radicales.

Contenido externo patrocinado