Les escribo desde Salinas, donde hemos estado con el equipo ecuatoriano de Copa Davis desde hace ocho días preparándonos para el encuentro de primera ronda de la Zona Americana Grupo 1 frente al fuerte equipo colombiano.
El Salinas Golf y Tenis Club es la sede de este evento por cuarta vez, una plaza que siempre fue favorable para el equipo nacional, ya que salimos airosos en las tres anteriores: contra Venezuela 3-2 en febrero de 1999, 4-1 contra Argentina en abril de 1999 y nuevamente contra los venezolanos por 3-2 en abril de 2003.
Nuestro objetivo es obtener la cuarta victoria del tenis ecuatoriano en la península.
Esta es la quinta vez que Ecuador y Colombia se miden en esta competencia, la más importante por equipos a nivel mundial, con saldo de dos triunfos por bando; la última vez que enfrentamos a los del norte fue en febrero del 2000, como visitantes en Bogotá, donde conseguimos un triunfo por 5-0, que sería el comienzo de un gran año para el tenis ecuatoriano, ya que después le ganaríamos al equipo peruano en Lima 3-2, culminando con el ascenso al grupo mundial, derrotando a Gran Bretaña en Londres en la misma catedral del tenis: Wimbledon.
En esa ocasión los colombianos tenían un equipo muy joven, mientras que nuestros jugadores eran en su mayoría experimentados. Estábamos liderados por Nicolás Lapentti -en su mejor momento-, quien estaba acompañado por Andrés Gómez, que aportaba toda su calidad en los dobles, un Luis Adrián Morejón con mucha experiencia y un prometedor Giovanni Lapentti.
Actualmente Colombia cuenta con un equipo muy sólido, con dos jugadores dentro de los mejores del mundo en individuales, Alejandro Falla (# 63 ATP) y Santiago Giraldo (# 54), y una pareja de dobles integrada por Juan Sebastián Cabal -finalista de Roland Garros 2011 en la especialidad- y Robert Farah, quienes además juegan juntos permanentemente en el circuito ATP.
Alejandro Falla llegó a Salinas con una molestia muscular en una de sus pantorrillas, causada por una lesión que sufrió durante el abierto de Australia y fue descartado como singlista; Robert Farah (# 235 ATP) su reemplazante, es un jugador de potente servicio y que se adapta bien a las superficies más rápidas.
Farah abrió la serie contra Julio César Campozano ayer desde las 10:00 y el crédito local se llevó el primer punto por 7-6 (4), 6-4 y 6-2.
El equipo ecuatoriano actual es muy joven, siendo el más experimentado Campozano, quien el año pasado tuvo un rendimiento muy bueno en las series contra Canadá y México en las cuales ganó tres de los cuatro partidos de singles que jugó y supo asumir en muy buena forma su papel de # 1 del elenco nacional.
Julio comenzó algo tarde su preparación, debido una hepatitis A, que lo mantuvo inactivo todo el mes de diciembre, pero su voluntad y ganas de representar al país le ayudaron mucho en su recuperación. En los entrenamientos su tenis fue creciendo día tras día y por eso llegó en buenas condiciones al partido con Robert Farah.
El “Negro” aprovechó la cancha de arcilla lenta y pesada que no es la más favorable para el juego del colombiano, un triunfo de Julio era clave para nuestras aspiraciones y lo consiguió ayer en dos horas y 45 minutos de juego.
Iván Endara también tuvo un buen 2011 en Copa Davis, derrotó al # 1 canadiense Vasek Pospisil y nos dio un punto importantísimo contra Daniel Garza, el # 1 mexicano en la victoria contra los aztecas que nos permitió mantenernos en el grupo 1.
Llegó bien físicamente, cumplió una intensa preparación con miras a este encuentro y a su temporada 2012, tuvo un partido muy duro contra Santiago Giraldo, el favorito era el colombiano y lo demostró ganándole a Iván 6-2, 4-6, 6-0 y 6-1.
Le indiqué a Iván que tenía que jugar suelto, aprovechar su potente derecha, su espíritu de lucha, que debía olvidarse de la diferencia de ranking entre ambos en Copa Davis porque todo podía pasar.
El tercer integrante del equipo es el quiteño Juan Sebastián Vivanco, quien debutó contra México en septiembre pasado, con apenas 21 años, un jugador muy dedicado, muy serio en sus entrenamientos y que poco a poco busca ganarse la titularidad.
El más joven miembro de esta selección, en su primera convocatoria oficial, es el guayaquileño Diego Hidalgo, de 18 años, que es una de las promesas del tenis nacional, un zurdo, de físico potente. Su carrera profesional es manejada por Nicolás Lapentti desde hace algunos años, tiene un futuro promisorio y podría tener su oportunidad de debutar en esta serie.
Tuvimos una excelente semana de entrenamiento en Salinas, con prácticas muy intensas, pero con una gran camaradería y unión entre todos los miembros del equipo; también contamos con la valiosa ayuda del Dr. Tyrone Flores en la parte médica, del profesor Christian Morales en la preparación física, y del fisioterapeuta Kléber Cevallos.
La verdad que tras 13 años como jugador y 18 como capitán, cada serie se la vive con la misma intensidad, las mismas ganas, la misma pasión, los mismos nervios de la primera vez, ya que tenemos la responsabilidad, el honor y el privilegio de representar al país y defender la rica tradición, historia y prestigio del tenis ecuatoriano.
Esperamos contar con buena cantidad de aficionados y su aliento permanente los tres días de competencia.
El apoyo del público es una de las ventajas de ser locales y una motivación extra para los jugadores. Esperamos ganar la serie en Salinas. ¡Arriba Ecuador!