Publicidad

Ecuador, 06 de Octubre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Lucrecia Maldonado

La hora de la mezquindad

27 de enero de 2016

Se ha dicho que la función de los medios de comunicación es en primer lugar informar, en segundo lugar, entretener. Se habla también de una ‘orientación’ de eso que se suele llamar pomposamente la ‘opinión pública’. Si todos los medios cumplieran simple y sencillamente con aquellas tres funciones, a cabalidad y a consciencia, sería suficiente. Incluso si uno u otro medio son de determinada tendencia política o ideológica. Incluso partiendo de la premisa de que la neutralidad total no existe ni existirá nunca y de que la imparcialidad podría unirse sin problema a las grandes utopías de la humanidad.

Sin embargo, está visto que no solo las columnas de opinión de los periódicos sirven para opinar. Por ejemplo, se puede leer en uno de los mayores diarios quiteños una ‘información’ con una ‘entrevista’ al cantautor Hugo Idrovo, relacionadas con su participación en la celebración del noveno aniversario de la Revolución Ciudadana. La información está destinada a censurar al cantautor por todos los frentes posibles. Las preguntas de la entrevista son absolutamente tendenciosas. Y, para variar, se acude como a una fuente cierta, casi inamovible y científica, a los santos evangelios de nuestro tiempo: las redes sociales, Twitter y Facebook.

La noticia es sencilla: pone a la vista de todo el mundo el hecho de que a algunas personas no les ha gustado que Hugo Idrovo cante en la citada celebración y así lo han manifestado en las redes, con el pulcro y educado estilo que se suele utilizar en estos casos: insulto va, palabrota viene, mentada a la madre de por medio, así funcionamos aquí. La cantidad de personas que han expresado este desagrado es irrelevante, pues sabemos que en este tipo de sapientísimas y preclaras fuentes de información una sola persona puede convertirse en veinte o más, dependiendo del caso, si de ‘marcar tendencia’ se trata.

Con una enorme cantidad de mezquindad y malicia se menciona además que Hugo Idrovo es funcionario del Gobierno, pues ocupa el cargo de director de Cultura en la provincia de Galápagos. La primera pregunta que surge ante esta mezcla de afirmación y queja es… ¿no puede? ¿Qué prohibición pesa sobre él para que esté impedido de ejercer este cargo? Y en seguida se cuestiona el monto de su sueldo a través de un cuadro comparativo, dando a entender que al presentarse en la celebración del aniversario lo que está haciendo es ‘devolver un favor’.  

Se aclara: es legítimo no estar de acuerdo con algo o con alguien. Tan legítimo como es estarlo. Es legítimo no apoyar un proceso con logros a la vista. Tan legítimo como es apoyarlo. Lo que no es legítimo es la información sesgada, la mala intención explícita o implícita, la maledicencia, la mezquindad. La cizaña debería excluirse de los formatos periodísticos. Y a los preclaros opinadores de las redes sociales se les debería dar la importancia que tienen: ninguna. (O)

Contenido externo patrocinado