Estados Unidos es el país más afectado por la pandemia del COVID-19, hasta el momento, reporta más de 37 millones de casos y más de 630 mil fallecidos. En 2020, la economía norteamericana decreció 3.4% constituyéndose en la mayor crisis desde la II Guerra Mundial. El producto interno bruto estadounidense pasó de USD 21.4 billones a USD 20.9 billones
La semana pasada, el Senado de Estados Unidos, con el apoyo de demócratas y republicanos, aprobó un presupuesto de USD 1.2 billones para el plan de infraestructura del presidente Joe Biden que anunció a través de twitter que:
¨el acuerdo bipartidista hará crecer la economía, creará trabajos bien pagados y pondrá a Estados Unidos en el camino de ganar el futuro¨.
El plan de obra pública del presidente Joe Biden propone ampliar la red vial, potenciar la red de ferrocarriles, modernizar la red eléctrica, solucionar los problemas de suministro de agua, reconstruir los aeropuertos y expandir el acceso a internet por banda ancha
Un eje muy importante es el retorno a la lucha contra el cambio climático mediante el financiamiento de USD 7500 millones para crear una red de estaciones de recarga de vehículos eléctricos. El presidente Joe Biden tiene el objetivo que, hasta 2030, la mitad de automóviles funcionen con electricidad. También, invertirá USD 47000 millones para mitigar los efectos del calentamiento global como las sequías y los incendios que son muy comunes durante el verano.
El presidente Joe Biden entiende perfectamente que la reactivación económica tiene como base la creación de fuentes de empleo mediante la obra pública y esos empleos, no calificados, exigen una buena remuneración y el respeto a los derechos fundamentales de los trabajadores.
En su primera intervención, ante el Congreso de Estados Unidos, en ocasión de sus primeros cien días en la Casa Blanca, el presidente Joe Biden respaldó la aprobación del Proyecto de Ley de Protección del Derecho a Organizarse (Protecting the Right to Organize Act) que tiene el objetivo de defender a las organizaciones de trabajadores y el derecho a la sindicalización. Biden ha sido claro en señalar que:
¨Wall Street no construyó el país sino la clase media y los sindicatos construyeron la clase media… los sindicatos empoderan a los trabajadores y nivelan el terreno de juego¨.
A la par, el presidente Joe Biden decretó el salario mínimo de USD 15 por hora.
Mientras tanto, en algún país sudamericano, frente a la crisis económica y el desempleo, el presidente de la República y sus ministros afirman que hay que reducir el Estado y los sindicatos no son interlocutores pues representarían tan solo a una minoría.