Hemos, por fin, entrado al terreno de compararnos, en forma objetiva, con otros países del mundo en cuanto a resultados en educación. El Programa Internacional para Evaluación de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés) es un modelo de evaluación creado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Desde el 2000 PISA realiza una evaluación trienal a estudiantes de 15 años, en las áreas de lectura, matemáticas y ciencias. El Informe PISA de 2018 muestra la lamentable realidad de Ecuador.
La evaluación establece seis niveles, del 1 al 6, de peor a mejor rendimiento. Se considera 2 como el nivel básico. Increíblemente el 71% de los estudiantes de Ecuador estuvo por debajo del nivel 2 en matemáticas, el 57% tampoco alcanzó el nivel 2 en ciencias y el 51% se quedó por debajo del nivel 2 en lectura. En Iberoamérica estamos mejor que Paraguay, República Dominicana, Honduras y Guatemala. Vamos casi igual que Perú y Brasil y estamos atrás de Colombia, México, Argentina, Uruguay, Chile, Portugal y España. Valga apuntar que España está casi 30 puestos atrás de los líderes Singapur y Hong Kong. La diferencia que nos sacan los países más exitosos en educación, como lo son los últimos señalados más Japón, Canadá, Estonia, Finlandia, Corea del Sur y Taiwán es descomunal y se aproxima a los 200 puntos en un rango de alrededor de 300 puntos (258-577).
Es importante el compararnos porque sabemos en dónde estamos y se termina la especulación. La realidad es aciaga y la tarea que queda por delante es titánica y durará décadas. Corea del Sur tenía aproximadamente el 70% de analfabetismo al final de la guerra de 1953 y en 50 años ya fue una potencia educativa y tecnológica, apostándole a la educación. Se impone el crear en Ecuador una política de Estado en educación, construida por la gente más preparada de la nación y que sea respetada por la sucesión de gobiernos de los próximos 50 años. La tarea debe hacerse con patriotismo, despojada de banderías políticas e incorporando la filosofía y gestión educativa de aquellas naciones exitosas. (O)