Según el último estudio de opinión de CEDATOS, entre junio y agosto, la aprobación de la gestión de presidente de la República creció de 71.4% a 73.5% sin embargo, Guillermo Lasso no tiene un cheque en blanco. En agosto de 2017, la aprobación de la gestión de Lenin Moreno llegó a 77% y finalizó su mandato con apenas 9%.
El mayor éxito del Gobierno es el Plan de Vacunación 9/100. A fines de mayo, el país contaba con 3 millones de vacunas, entre ellas, 2 millones inoculadas; y, hoy, el país cuenta con casi 16 millones de vacunas, entre ellas, 12 millones inoculadas.
El triunfo en las Elecciones Presidenciales del pasado 11 de abril, tras haber obtenido menos de uno de cada cinco votos y la tela de duda sobre los resultados de la primera vuelta por un posible fraude electoral, fue consecuencia de una buena lectura política. El slogan de la campaña electoral pasó de ser ¨capacidad para cambiar¨ a ¨encontrémonos¨ que era una invitación a sumar a las otras tendencias. Guillermo Lasso ganó en 12 de las 13 provincias en que había ganado Yaku Pérez; y, Carchi en que había ganado Xavier Hervas; en Imbabura y Santo Domingo de los Tsáchilas, viró la correlación de fuerzas con su oponente.
El país vive la mayor crisis económica de su historia; en 2020, la economía decreció 7.8%. Menos de uno de cada tres de la población económicamente activa tiene un empleo adecuado, el resto batalla día a día para sobrevivir. El 32% vive con menos de USD 85 mensuales y el 15% con menos de USD 48. El Ecuador heredado por el Gobierno de Guillermo Lasso tiene enormes problemas y exige acuerdos nacionales.
Los principales movimientos sociales, el Frente Unitario de los Trabajadores (FUT) desde los 70 y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) desde los 80, más allá de sus reivindicaciones propias de su naturaleza, representan a las grandes mayorías. Durante el Gobierno de Rafael Correa, probaron su vigencia y fuerza.
Para el próximo 11 de agosto, el FUT y la CONAIE convocaron a las primeras movilizaciones en el Gobierno de Guillermo Lasso, solicitan ser escuchados, sus reivindicaciones son el fin del incremento mensual de los combustibles, la moratoria de créditos en el sistema financiero a favor de las familias endeudas en la pandemia, la defensa del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, la conservación de la naturaleza y el pronunciamiento de la Corte Constitucional sobre la reforma a la Ley Orgánica de Educación Intercultural y la Ley Orgánica de Apoyo Humanitario.
También, han planteado una sustancial propuesta, una rigurosa política fiscal para los grandes grupos económicos. Una investigación del Instituto de Formación Política Manuel Córdova Galarza estima que si se grava a los 270 mayores grupos económicos que poseen activos entre USD 42 millones y más de USD 673 millones, con una tasa entre el 2% y el 3%, existiría una recaudación potencial superior a USD 4.133 millones.
Si el Gobierno del encuentro no dialoga con los principales movimientos sociales del país, en medio de la mayor crisis de nuestra historia, más temprano que tarde, habrá una explosión social más importante que en octubre de 2019. No es una amenaza sino que así confirman las experiencias latinoamericanas recientes de Chile y Colombia. La política de estigmatización del otro, como en los últimos años, no es una opción. Encontrémonos.