El hombre retrocede en serio, la mujer solo para tomar impulso
20 de septiembre de 2011Aunque digan que en Latinoamérica la crisis financiera no será tan drástica, sí va a afectar nuestras vidas y vamos a tener que ajustarnos el cinturón y adaptarnos a condiciones distintas. Parte de estos cambios tendremos que enfrentarlos las mujeres y de la forma como asumamos los retos que nos impone, dependerá el que no perdamos los logros laborales alcanzados con tanto esfuerzo.
Mujeres en mayor medida que hombres se podrán ver afectadas, porque a pesar de que ha aumentado la inclusión femenina en el mundo laboral, esta sigue siendo vulnerable, debido a que tiene trabajos más precarios o salarios más bajos, ya porque no tienen más alternativa, ya porque tiene que compaginar su necesidad de ingresos con sus obligaciones familiares. La OIT ha revelado que en la medida que las dificultades se extienden de otros sectores al de servicios donde laboran más mujeres, estas pueden quedar más expuestas, pues las crisis pasadas han mostrado que cuando una mujer pierde su empleo, luego le cuesta más trabajo encontrar otro, cuando comienza la reactivación económica.
Si bien épocas difíciles son tiempos de oportunidad, es un hecho que la mujer tiene que ser mucho más previsiva para enfrentar los cambios que se avecinan. Encontré un artículo que había llamado mi atención hace como tres años, escrito por Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, que terminó siendo más actual hoy que entonces, pues habla de cómo la mujer “se agiganta en las crisis… guerras, catástrofes naturales, depresiones económicas, conflictos políticos son testigos de su generosa entrega y su capacidad de multiplicarse y cubrir más responsabilidades. Sin embargo, en ello también se desgasta y, muchas veces, pasada la tormenta, pierde espacios y oportunidades que no son fáciles de recuperar. Que esta vez no sea así. Comprometámonos a evitar que la actual crisis económica sea una excusa para detener el avance de la mujer en todos los ámbitos”.
Los valores de que habla la señora Bárcena son, entre otros, aquellos que deben llevar a la reflexión a quienes deciden sobre políticas laborales para enfrentar la crisis. No en vano decía la famosa actriz Zsa Zsa Gabor: “Cuando un hombre se echa atrás, solo retrocede de verdad, mientras que una mujer solo retrocede para coger impulso”.
Y es que cuando se ve tan afectada la mujer, los pilares de la familia tambalean y con ello nuestra sociedad completa; por eso es que es tan necesaria la igualdad de género en el trabajo, y no es solo cuestión de dignidad sino de equidad.