¡Qué ironía! Una vida tan prolífica y productiva se acabó tan de repente. La acción vital de Santiago Gangotena nunca acabará de medirse ni agotarse. Su obra está viva. Hombre fuerte como un volcán de sabiduría. Hombre de culturas y de todos los tiempos. Todo fue tan de repente y sorpresivo. Nos sorprendió a todos.
Conocí a Santiago Gangotena y me pareció un gran ecuatoriano. Sencillo, sin poses, amante de la ciencia y el conocimiento. Siempre atreviéndose a más, rompiendo sus propios límites y fronteras. Santiago era universal. Fundó la Universidad San Francisco de Quito con pasión, tesón e inteligencia. Y todo le salió bien.
La USFQ es la mejor Universidad del país. Atrás dejó a la pontificia de Quito. La San Francisco es la gran vanguardia de la educación superior innovadora del país. Ha superado al resto de universidades con creces y calidad. El éxito de éste gran hombre fue su compromiso y calidez. Su liderazgo rompía paradigmas y tradiciones. Servía a todos por igual. Emprendió en la San Francisco un programa de becas dirigido a los más necesitados. En la USFQ estudiaba la élite y jóvenes que siendo beneficiarios de becas se incorporaban al vertiginoso ambiente de la Universidad.
Mi homenaje a Santiago Gangotena. Me inclino reverente ante su legado de grandeza y civismo. Santiago amaste a la patria. Acompañó a la comunidad universitaria de la San Francisco en su sentimiento de pesar.