Hay una controversia sobre si la dolarización fue la causa de la gran migración ecuatoriana de finales de los 90. Y la realidad es que nuestro país tiene un modelo de migración diverso. Con 17 millones de habitantes, somos uno de los más grandes grupos de emigrantes en el área metropolitana de Nueva York y posiblemente el segundo en España.
En los pasados 40 años, Ecuador experimentó dos grandes olas, que ha enviado entre 10% a 15% de nuestros compatriotas, especialmente a EE.UU., España, Italia y, en su momento, aun a Venezuela y a Chile.
Antes de 1960 la migración ecuatoriana era mínima; la mayor parte a EE.UU. y a Venezuela, por su economía petrolera. Las provincias australes de Azuay y Cañar, que vivían de la agricultura y de la tejeduría de sombreros de paja, son las que inician la primera gran oleada de migración en los 70 y 80; en muchos casos, en forma clandestina, la cual aún perdura mediante el “coyoterismo”. Son -en general- campesinos que buscaban salir de la pobreza.
La crisis económica de los 90, con la continua e incontrolable devaluación del sucre debido a los bajos precios del petróleo, las inundaciones que arruinaron sembríos y carreteras, con un desempleo superior al 15% y un nivel de pobreza del 56% provoca la segunda oleada de emigración, pero esta vez de todas las provincias y ahora es de gente de las zonas urbanas y con más educación.
El pico de la salida de gente fue entre 1998 y 2004. Los más pesimistas estimados indican que se fueron 3 millones de ciudadanos. Estudios más cuidadosos llevados a cabo por las Naciones Unidas y la Flacso establecen una cifra más conservadora de 1,5 millones de ecuatorianos.
Esta crisis económica llevó al expresidente Mahuad a anunciar la dolarización y el feriado bancario en enero 2000, para contener la devaluación e inflación galopantes, pero no contuvo la migración que 20 años después sigue saliendo del país, en menos cantidad.
O tal vez imperceptibles, por el número de refugiados colombianos que hemos acogido en estos años y ahora el éxodo de venezolanos a Ecuador y a otros países. Y las causas de la migración son las mismas. (O)