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El Telégrafo
Duglas Rangel

Después de la pandemia

05 de enero de 2021

Por ahora estamos y seguimos sometidos a la presencia nefasta del virus. La segunda ola de la covid-19 está causando daño. Los contagios y la cifra de muertos relacionados con el virus continúan en aumento. El peligro no ha desaparecido y no tiene cara de desaparecer a corto plazo. Tenemos que estar alertas ante su presencia fatal.

 

Reconozco que la covid-19 ha sido y es una fatalidad. Fue el más importante tema y asunto del 2020. La presencia del virus nos obligó a mantenernos encerrados en casa, temer al contagio, ver la quiebra de negocios y constatar la pérdida de empleos. El virus no es fácil, siempre es maligno para la salud y las finanzas.

 

Pero pasará. El virus en un momento determinado pasará. Dejará de ser peligroso y letal y aprenderemos a vivir y convivir con él. No es un virus para cien años. No: es un virus para ahora. Su mayor fuerza fue en el 2020. Ahora ya está la vacuna. La vacuna contra el coronavirus es un gran logro de la civilización y de las ciencias. La vacuna es para acabar con el virus. Es detener su avance y que deje de causarnos tanto daño. Quiero agradecer a los científicos que en condiciones tan adversas le han traído a la humanidad una vacuna convincente y clínicamente comprobada para librarnos del virus y su letal propagación.

 

Si vemos al virus en éste momento, será con temor y zozobra. Pero, ¿cómo será la vida de la sociedad cuando la covid-19 haya desaparecido, o por lo menos cuando haya disminuido su contagio? Cuando ya no sea tan maligno traerá a la humanidad un tiempo de libertad y sabiduría.

 

Sin duda el descubrimiento de la vacuna traerá nuevos descubrimientos médicos que pondrán fin a tanto padecimiento a nuestra salud con enfermedades como el cáncer, la diabetes, el alzhameir y otras enfermedades autoinmunes. Ante la ausencia de la covid-19 vendrá un tiempo de libertad y libertades.

 

Se viene un tiempo que va a ofrecer facilidad para viajar y conocer otros lugares y regiones. Olas de migrantes buscarán países prósperos y ricos para establecerse y crear riqueza y fortuna. La tecnología nos va a traer nuevos descubrimientos técnicos que nos van a simplificar la existencia. Se viene una mayor difusión del comercio y un nuevo tipo de relaciones sexuales en las que va a primar el gozo y la satisfacción. Se viene un orden justo, de tolerancia y nuevas dinámicas para la sociedad y la familia.

 

El mundo se va a recuperar. La covid-19 será un mal recuerdo y vamos a vivir con mayor énfasis en la temporalidad de las cosas y de las personas. El mundo estará establecido por una cada mayor feminización del poder y de la relación de la mujer con la política, los deportes, la gastronomía, la sociedad en general. Sobrevivir a la covid-19 significa vivir en el mundo que viene. Lo que viene será el fin del contagio y la libertad para disfrutar con mayor plenitud la vida y las posibilidades.

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