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El Telégrafo
Carlos Silva Koppel

Corrupción = estupidez

18 de mayo de 2020

Podemos hacer una lista larga de lo que la pandemia ha dejado al descubierto. En ella consta la estupidez como condición humana y que bajo ningún concepto, categorías geográficas, etarias, étnicas, etc., le condicionaría.

Lo vimos al inicio de la emergencia cuando se dio lugar la masiva e inexplicable compra de papeles higiénicos. También en las negligencias acerca del virus, a cargo de los gobiernos de las superpotencias. En el Primer Mundo el virus se extendió en gran parte por la irresponsabilidad de la gente. Podríamos pensar que la cabeza nos funciona con lógica de meme, pero no, desde antes ya éramos así.

 En el suelo nos tienen que pintar circulitos de colores para que sepamos cuánto es un metro de distancia en relación a otra persona. Todavía así, se nos hace demasiado difícil posarnos en aquél círculo. Con este ejemplo basta, estaría demás hablar de todo lo que irrespetamos con respecto a las normas de convivencia. Si no lo hacíamos con las antiguas, ¿lo haremos con las nuevas más complejas?

Pero la estupidez tiene en su mismo hilo lo que en Guayaquil llaman el “sabido”. Dícese de un individuo que se cree mejor que los demás por irrespetar las normas, saltarse las filas, obtener salvoconductos falsos para circular… ser la excepción: “único y diferente”. Sin embargo, le tienen como ejemplo a seguir.

Ser un troll (originalmente, monstruos de la mitología nórdica que vivían escondidos y que salían solo para cometer atrocidades) de redes sociales y no dar ni la cara, es también una manera de corrupción.

El corrupto es un estúpido, primero, porque se cree mejor que el resto en su idea de engañarnos, cuando en realidad se está engañando a sí mismo de que es mejor que los demás por saltarse las normas o romper la ley. Segundo, por las consecuencias que tarde o temprano tendrá que pagar y tercero, por no saber el daño que hace al resto. Si lo supiera, sería más bien un psicópata.

Los corruptos en este país siempre han existido, pero con la pandemia se descubrirán más de estas gárgolas y quedarán en piedra a la luz de la ley… mientras sea independiente. (O)

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