Chille, nuestro hermano país del sur del continente, este 18 de septiembre celebró 213 años de vida republicana y el 11 de septiembre se cumplieron 50 años del Golpe Militar, en que una Junta Militar usurpó el poder, tras el bombardeo del Palacio de Gobierno - La Moneda - y el posterior suicidio del presidente Salvador Allende, quien democráticamente había ganado las elecciones presidenciales el año 1970 asumiendo la principal magistratura del país. Este evento marcó el inicio de una dictadura militar que duró hasta el año 1990. Durante este período se produjeron violaciones a los derechos humanos y represiones, produciéndose un quiebre institucional y social que aún no se logra enmendar.
Enumerar las causas que llevaron a este fatídico hecho, son numerosas, pero sin duda la principal es el egoísmo y la falta de concesos para gobernar un país en la búsqueda del bien común, principio ético y político que busca el beneficio y prosperidad de todos los miembros de una sociedad, en lugar de privilegiar a unos pocos.
La democracia es un sistema de gobierno en el cual el poder político reside en el pueblo. En una democracia, los ciudadanos tienen el derecho de participar en la toma de decisiones, ya sea directamente o a través de representantes elegidos, asuntos que en una dictadura no ocurren.
Sin embargo, es importante reconocer que ninguna forma de gobierno es perfecta, y la democracia también tiene sus desafíos y defectos. Estos pueden incluir la polarización política, la corrupción, la desigualdad y la burocracia en la toma de decisiones, por lo que la calidad de la democracia puede variar significativamente de un país a otro.
En última instancia, la percepción de si la democracia es el mejor sistema o no puede depender de la cultura, la historia y las circunstancias específicas de cada sociedad. A menudo, las discusiones sobre la democracia se centran en cómo mejorarla y abordar sus defectos para que siga siendo un sistema eficaz y justo.
Tener que matarnos, entre hermanos de un mismo país, como ocurrió en el Chile de 1973, para conseguir la paz social es la más horrenda muestra de la decadencia de la raza humana. No se puede vivir en este mundo, y menos gobernar, priorizando solo nuestros propios intereses o los de un determinado grupo, por encima del de los demás.
El Chile actual vive en democracia, pero a pesar del crecimiento económico sostenido ha presentado persistentes niveles de desigualdad económica. Esto ha llevado a tensiones y protestas sociales en varios momentos, con demandas de reformas, en las que se encuentran hoy enfocados, para disminuir la gran diferencia en la calidad de vida entre ricos y pobres.