Transcurría el año 2011, Correa era el emperador del Ecuador. Estábamos con Galo Lara, quien era asambleísta conversando en un café. De pronto recibe una llamada telefónica y alguien le informa que lo están involucrando a él y a su pareja Carolina Llanos en unos hechos sangrientos ocurridos en Quinsaloma, provincia de Los Ríos. Lo escucho decir: "¿Quinsaloma? ¿Y qué es lo que ha pasado allá?" Y luego dijo: "¿Y yo qué tengo qué hacer allí, qué me están acusando?".
Yo estaba ahí junto a Galo Lara cuando se entera del caso Quinsaloma y de la acusación que el correísmo le montó. Con esa falsa acusación metieron presa a Carolina Llanos quien pasó ocho años presa cumpliéndo una sentencia de veinte años que le impusieron jueces terribles que ya están siendo juzgados por la historia.
El dolor es grande pero la justicia es grande también. Hoy magistrados de justicia dignos y libres de la maldad correísta han resuelto el estado de inocencia de Carolina y de Galo Lara y Gilbert Llanos. Libres de esa perversidad, libres de una horrenda persecución. Son gente libre a quienes un día Correa destrozó sus vidas y la de sus familias.
Estás líneas son un homenaje a Carolina Llanos. Mujer fuerte, mujer de orquídeas perfumadas y ternura acumulada. Eres libre mujer y eres símbolo de la libertad y la resistencia.
Solícito al Sr presidente Lasso conceda a Carolina, a Galo y a Gilbert les entregué la presea "libertad" a éstas honorables personas que sufrieron un vergonzoso y represivo abuso de poder que jamás debe repetirse.
Carolina la bella, saludo tu estirpe de mujer grande. Un gran abrazo al comunicador Carlos Vera Rodríguez por ese gigante programa en TC TV en el que nos mostró la cara diabólica del correismo. Bien Carlos bien.