Bankgangster: las malas prácticas de algunos bancos, emisores de tarjetas y banqueros
22 de octubre de 2012Recientemente se han descubierto malas prácticas de bancos internacionales y sus ejecutivos, que han afectado a sus clientes. En España, las entidades financieras colocaron participaciones preferentes, una inversión financiera que podía generar pérdidas a los clientes, los que no fueron informados de los riesgos. Los tribunales españoles han fallado en favor de estos, obligando al banco francés BNP Paribas España y a Novagalicia pagar intereses de la inversión, más multas por la operación engañosa, que ha sentado precedentes. Como hay muchos perjudicados, crearon la Plataforma de Afectados por Participaciones Preferentes para defenderlos.
Algunos directivos y ejecutivos de Cajas de Ahorro, intervenidas por Banco de España, regulador y supervisor del sistema financiero, recibieron millonarias indemnizaciones y fondos pensiones, que se adjudicaron antes de dejar la institución, lo cual contribuyó a empeorar su situación financiera, algunas de la cuales quebraron. Parte de estos fondos públicos de salvamento fueron a parar a manos de estos ambiciosos ejecutivos afectando a los contribuyentes.
American Express, tarjeta de crédito, está acusada de cobrar comisiones ilegales a sus clientes y de cobro de deudas inexistentes. Para compensar a sus clientes, llegó a un acuerdo con las autoridades americanas, a fin de crear un fondo de 85 millones de dólares para devolver los cobros ilegales. J.P. Morgan ha sido acusado, por el Fiscal de Nueva York, por un fraude sistemático en venta de activos respaldado por hipotecas problemáticas, pero derivado de la absorción del banco de inversión Bearn Stearns.
En Inglaterra, el banco Barclays manipuló el tipo de interés interbancario -la tasa Libor, fijada en Londres- que sirve de referencia para créditos, hipotecas y derivados financieros, lo cual favoreció sus ganancias por el aumento del costo financiero de operaciones crediticias, perjudicando a clientes por mayor costo del crédito e hipotecas, que ha dado lugar a multas millonarias por parte de autoridades de Inglaterra. El Fiscal de Nueva York ha citado al Citigroup y J.P. Morgan; las británicas Barclays, Royal Bank of Scotland y HSBC, la alemana Deutsche Bank y la suiza UBS por sus posibles implicaciones.
Otro caso es el del banco inglés HSBC, cuya sucursal en México está acusada, por el senado americano, de tener un débil control de lavado de activos. Existen mecanismos de supervisión para este riesgo, pero la complicidad de algunos ejecutivos permitió el blanqueo de capitales, que le obligó a cerrar cuentas en paraísos fiscales (Islas Caimán). Lo sorprendente es que las autoridades supervisoras nacionales no hayan detectado el problema y el GAFI no imponga sanciones al vecino de EE.UU.
En el país, con el salvataje bancario las entidades financieras aprovecharon los recursos entregados por el BCE a su favor. La autoridad supervisora debe exigirles aplicar un código de ética, un buen gobierno corporativo, poner en operatividad al Defensor del Cliente, aumentar los controles, establecer severas sanciones para las malas prácticas de los banqueros que afectan los derechos de sus clientes, los que están en indefensión.