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El Telégrafo
José Velásquez

Asamblea de vergüenza

07 de enero de 2019

Que alce la mano quien se sienta representado por esta Asamblea Nacional. El balance de 2018 se resume en destituciones y escándalos.

En marzo destituyó a su presidente José Serrano por ser el compadre lindo del excontralor Pólit. Una avalancha de 103 votos lo pasó por encima y asumió Elizabeth Cabezas. En abril con escoba nueva barriendo mejor se fijaron una agenda legislativa para tratar 48 proyectos hasta mayo de 2019. Cerraron el año con apenas 19 leyes aprobadas. Suena a mucho pero en Nicaragua, donde reina la anarquía de Ortega, la Asamblea evacuó 16 leyes. En Argentina, el Congreso cerró diciembre con 36 leyes, lo que constituye su año menos productivo desde 1987 cuando aprobaron 57 leyes.

En la labor de fiscalización, los asambleístas destituyeron a dos de los suyos: Norma Vallejo y Sofía Espín. Y le bajaron el pulgar a su excolega Vicuña. ¿Pero han fiscalizado realmente? No. Ni esta ni las Asambleas de la década ganada. El gran fiscalizador del país se llama Julio César Trujillo. María José Carrión queda debiendo más que don Ramón. Aprobaron por unanimidad la Ley Orgánica de Lucha contra la Corrupción pero le dieron la espalda al país cuando cerraron filas en torno al escándalo de los diezmos. Solo cayó Vallejo por la contundencia de la evidencia y la exposición en redes. Ahora veremos si Ana Galarza se sostiene o si el soplido de un exasesor resentido la logra tumbar.

Este no es el Congreso de los ceniceros voladores o de las pistolas visibles. Tampoco es la legislatura de Nebot y su poca amable invitación a un colega. Ahora coexisten allí el piponazgo y el abuso patronal; el chisme de los analistas y los cantos de sirena de ambulantes politólogos pitonizos. Casi US$ 50 millones le costará al país mantener a la Asamblea en 2019. Es básicamente gasto corriente en sueldos, dietas y pago de cuentas, como los US$ 300 mil de una campaña publicitaria que duró un poco más de un mes. La “buena noticia” es que este año habrá ahorro en comparación a los US$ 58 millones presupuestados inicialmente para 2018.

Una encuesta de Cedatos, difundida en noviembre señala que el 67,9% de los entrevistados no cree en los asambleístas. En el reporte de diciembre de Perfiles de Opinión el 70,5% de sus encuestados calificó la labor de la Asamblea como mala o muy mala. Nos quedan debiendo. Y mucho. (O)

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