Publicidad

Ecuador, 22 de Noviembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Simón Valdivieso Vintimilla

Amanecerá y …

16 de abril de 2021

Amanecerá y veremos. Es un pensamiento  fresco y oportuno para empezar en la columna después del proceso electoral del domingo 11 de abril, cuyo resultado ya lo tenemos; resultado que responde a la vocación democrática de los ecuatorianos, que debe ser respetado y entendido porque así es el juego de la democracia cuando se le apuesta al poder.

Una cosa es con guitarra y otra con violín. Ya terminó la campaña y ahora adviene el cumplimiento de las promesas electorales. El 24 de mayo de 2021 es el punto de partida del ejercicio del poder por parte del tres veces candidato al solio presidencial y que abrigamos la esperanza no se encuentre con los fantasmas del que se quejó un ex Inquilino de Carondelet y que por eso es que hizo lo que hizo defraudando la voluntad popular.

Y es que el poder desenmascara. Es otra verdad que debe ser considerada por quienes confiamos el destino de la patria en un ser humano que  es tan igual que nosotros, que pudo  superar la resistencia que se hizo sobre la base de una etiqueta mal escrita que es ser propietario de un banco y al que se le acusó de algo en lo que no había participado, fundados en un odio tan antiguo como el mundo como es el de aborrecer la fortuna, cuando todos la quieren tener.

Escuché a un amigo decir que el triunfo se debe al slogan  “Ya que chucha”. No creo sea la respuesta adecuada, pues eso sería  restar la capacidad reflexiva de los ecuatorianos. Hay varios factores que llevaron a ese resultado como son los miedos y cucos que nos vendieron por lo que hemos sido testigos de lo que pasa en la tierra del Caraqueño Americano, cuyo ideal ha sido blasfemado desde hace algunas décadas en nombre de un proyecto de vida como es el socialismo mal entendido y mal practicado, dividiendo al pueblo y desarraigándolo; amén de lo que el líder del movimiento perdedor representaba. No es asunto de castigar a los ricos para satisfacer a los  pobres, sino llenar las barrigas vacías de éstos y garantizar el ejercicio de nuestros derechos.  En fin, veamos que pasa con el ejercicio del poder. Hay mucha oferta, gran expectativa y poco tiempo para sentir cualquier cambio. (O)

Contenido externo patrocinado