Comunidades Waoranis y Kichwas del Yasuní irán por el No en la Consulta Popular
“Nuestra postura, frontalmente, vamos por el No porque la industria petrolera nos ha traído desarrollo, educación y bienestar a todas las comunidades”, dice firme Lauro Papa, presidente de las organizaciones indígenas de Aguarico, durante la Asamblea Aguarico en Unidad 2023.
Representantes de 16 comunidades Waoranis y kichwas del Yasuní se reunieron en el Coliseo de la cabecera cantonal de Tiputini para emitir una resolución en torno a la Consulta Popular del próximo 20 de agosto de 2023. Ellos irán por el No; es decir, están en contra de que las actividades de extracción petrolera finalicen.
“Ahora hay calles, hay agua potable, tenemos trabajo”, destaca el dirigente y añade que, aunque se trata de una Consulta nacional, las comunidades de la zona de influencia son quienes deberían tomar la decisión. Esto porque, a su criterio, serían ellos quienes se verían seriamente afectados si las operaciones finalizan.
En el Yasuní se ubican tres bloques de extracción Petrolera: 16, 31 y 43, compuestos por 11 campos. Este último, el Ishpingo, Tambococha Tiputini (ITT) es el que cesaría sus funciones si los ecuatorianos así lo deciden. Sin embargo, según informó Petroecuador EP a El Telégrafo, el desmantelamiento no se podría realizar en el tiempo determinado por la Corte Constitucional de 1 año. Al menos, dicen, tomaría 5 años.
Los expertos de campo consideran que se debería manejar un plan a 10 años para finalizar las operaciones y ejecutar planes que permitan el desarrollo sostenible de las comunidades una vez que la petrolera salga de la zona.
Durante la Asamblea, los dirigentes de comunidades como Samona, Kawymeno, Boca Tiputini, entre otras, denunciaron que colectivos ambientales se han tomado su nombre para proponer una consulta que no les representa. “Quieren acabar con nuestros ingresos, pero ¿cuándo han venido a proponernos algo para el desarrollo?”, preguntó Rosa Grefa, lideresa de Aguarico.
La postura tras la Asamblea Comunitaria fue de rechazo a la Consunta Popular. Y los representantes de las 16 comunidades anunciaron acciones de diálogo para que el resto de ecuatorianos respalde su decisión. Esto debido a la pérdida que representaría no solo para las zonas de influencia, sino también para la economía nacional.