En 2008 Ecuador emitió la alarma sobre espionaje
Las presunciones de espionaje en el país no son nuevas. Los documentos de Edward Snowden que Ecuador era vigilado por las agencias norteamericanas CIA y NSA desde 2007 alimentan las acusaciones del Gobierno de que existen infiltraciones en sectores de seguridad del país.
El ataque de militares colombianos a un campamento clandestino de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ubicado en el sector de Angostura (provincia de Sucumbíos), despertó la indignación del Gobierno Nacional, pero con el transcurso de los días se descubrieron hechos que condujeron a considerar que hubo actos de espionaje en el país.
Tras el rompimiento de las relaciones con Colombia por causa del ataque se descubrió la existencia de infiltraciones en los servicios de inteligencia. El mismo presidente Rafael Correa dijo en abril de 2008 que el servicio ecuatoriano de inteligencia está infiltrado por la agencia de espionaje de EE.UU. “Hay casos vergonzosos en que la CIA financia ciertas unidades de inteligencia ecuatorianas, cuyos informes eran remitidos directamente a la CIA que, a su vez, se los transmitía al Gobierno de Colombia”, expresó Correa en esa ocasión.
Esto, a raíz de informes de inteligencia que vinculaban al ciudadano ecuatoriano Franklin Aisalla con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y que murió en el ataque, así como a Julio César Rivera Flores, conocido como el Pirata, quien habría colaborado para que se realice el bombardeo.
Como producto de esta situación hubo cambios en la cúpula policial y reestructuración en los servicios de Inteligencia ecuatorianos, principalmente se produjo la salida del director de Inteligencia del Ejército, Mario Pazmiño, siendo señalado como presunto informante de la agencia norteamericana CIA.
En el año 2010, Pazmiño volvió a ser noticia, cuando el Gobierno lo señaló como uno de los participantes en una reunión de sectores de oposición que se efectuó en Miami días antes de la asonada del 30 de septiembre de 2010.
En ese mismo año se divulgaron denuncias de la prensa de un supuesto espionaje de la inteligencia de Colombia al Mandatario ecuatoriano. Miguel Carvajal, quien era ministro de Seguridad Interna y Externa, calificó las denuncias como preocupantes. Pero fuentes de ese país negaron las acusaciones.
Actos violatorios
El canciller Ricardo Patiño expresó que estas actividades no son otra cosa que una violación al derecho internacional. “Se conoció que Ecuador es vigilado. Ojalá las relaciones internacionales comiencen a cambiar”, manifestó.
Incluso no descartó la posibilidad de que estas informaciones reveladas por el exagente de la NSA, Edward Snowden, a través del diario brasileño O Globo, puedan ser llevadas ante la asamblea de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que se realizará en septiembre de este año, para exigir que se ponga fin a estas prácticas.
Desde la Asamblea Nacional también hubo voces de rechazo. El asambleísta Fernando Bustamante expresó que es necesario que la comunidad mundial analice la contradicción entre seguridad y libertad; “no puede ser que el Gobierno norteamericano nos ponga en el dilema entre seguridad y libertad”, indicó.
Gabriel Rivera consideró necesario que entre todos los parlamentos se efectúe una política común, para enfrentar lo que consideró una amenaza al espionaje.
Colombia y EE.UU.
El embajador estadounidense en Colombia, Peter Michael McKinley, expresó ayer que su país responderá a las autoridades colombianas a través de los canales diplomáticos sobre el caso del supuesto espionaje en varias naciones de la región.
McKinley señaló que las autoridades colombianas le notificaron ayer de su demanda de explicaciones a EE.UU. sobre las informaciones reveladas en medios brasileños en las que el país andino aparecía como un “blanco prioritario” para la inteligencia estadounidense.
“La Cancillería me informó anoche (martes) y he informado a Washington”, expresó McKinley y aseguró que EE.UU. responderá a Colombia “a través de canales diplomáticos” a “las preocupaciones que vienen a raíz de las revelaciones en la prensa sobre las actividades de inteligencia clasificada”.
El anuncio se dio luego de que el Gobierno colombiano informara que solicitará “explicaciones” a EE.UU. sobre este caso de espionaje masivo por la NSA y la CIA en la región. “El Gobierno Nacional registra con preocupación la información de algunos medios de prensa internacionales sobre la existencia de un programa de recopilación no autorizada de datos y de interceptación de comunicaciones personales en Colombia”, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
Además de la “preocupación” por estas informaciones, en el comunicado la Cancillería “rechaza los actos de espionaje violatorios del derecho a la intimidad de las personas, y de las convenciones internacionales en materia de telecomunicaciones”.
ORGANIZACIÓN DIO PASAPORTE A SNOWDEN
La organización no gubernamental World Service Authority (WSA) emitió un pasaporte mundial para Edward Snowden, que le permitirá, según sus miembros, llegar al país deseado. La WSA fue fundada en 1954 y sus pasaportes -según la misma organización- son reconocidos por varios países del mundo, en su mayoría de África.
La WSA insiste en que el documento es reconocido por la Organización de Aviación Civil Internacional, lo que debe permitir a una persona salir del aeropuerto y viajar en aviones legalmente. Muchos países no reconocen el pasaporte mundial, ya que no es emitido por una autoridad gubernamental competente.
BRASIL LLEVARÁ TEMA ESPIONAJE AL MERCOSUR
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, propondrá a sus colegas del Mercosur debatir sobre el espionaje de Estados Unidos en la cumbre que se efectuará mañana en Montevideo, Uruguay.
El Ejecutivo y el bloque oficialista de senadores señalaron que el tema del espionaje, por parte de Estados Unidos, fue mencionado como uno de los temas que querrá incluir Rousseff en la agenda de la cumbre del Mercosur.
El secretario general de la Presidencia, Giberto Carvalho, señaló ayer que la cumbre será “una buena ocasión” para que Rousseff trate el tema con los otros presidentes, informó el sitio del diario Folha, recogido por la agencia de noticias Ansa. “Cualquier ataque a la soberanía de un país tiene que ser respondido con mucha dureza, porque si uno baja la cabeza mañana ellos nos pasan por arriba”, enfatizó Carvalho, quien resaltó que el Gobierno brasileño considera “gravísimo” el episodio.
El senador Eduardo Suplicy, del gobernante Partido de los Trabajadores, aseguró que Rousseff expresará su cuestionamiento a Estados Unidos en la cumbre del bloque regional. “No conversé con la presidenta sobre la reunión del Mercosur, ahora, como ella ya declaró que no concuerda con la invasión de las comunicaciones por el espionaje norteamericano, posiblemente volverá sobre el tema” en la cita de Montevideo, dijo el senador.