La operación lanzada por el Gobierno ucraniano contra los insurgentes prorrusos llegó a las zonas residenciales en el corazón de Donetsk y Slaviansk, con fuego de morteros.

Esto mientras el presidente electo de Ucrania, el multimillonario Petro Poroshenko, pidió a Estados Unidos que se acuerde de las prácticas de la Segunda Guerra Mundial y aplique a su país el programa de Préstamo y Arriendo, enviándole ayuda militar directa, según informó la cadena de noticias Russia Today (RT).

En virtud del programa del Préstamo y Arriendo, Washington envió a las naciones aliadas, entre los años 1941 y 1945, municiones, equipamiento, alimentos y materias primas estratégicas, sobre todo combustible. En su entrevista concedida al diario estadounidense The Washington Post, Poroshenko propuso reanimar estas prácticas.

Ayer, al menos una decena de civiles resultaron heridos por esquirlas de proyectiles de artillería disparados en el centro de Slaviansk, bastión de la rebelión prorrusa contra Kiev, en un ataque entre las milicias y el ejército ucraniano. Uno de los proyectiles cayó sobre un colegio y destrozó la azotea del edificio mientras los alumnos se refugiaban en el sótano. (AFP)