La reforma integral de la Ley de Inteligencia impulsada por el Poder Ejecutivo, que dispone la disolución de la Secretaría de Inteligencia (SI) y la creación de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), desde esta tarde será debatida en el Senado de Argentina.  

La oposición argentina muestra divergencias de enfoque sobre la enmienda propuesta por Cristina Fernández, que será analizada en el marco de la sesión extraordinaria solicitada por la mandataria.

El propósito del anteproyecto, afirmó la presidenta, es democratizar y transparentar los servicios de inteligencia de Argentina que es a su juicio “saldar una vieja deuda de la democracia”.

La iniciativa surgió 48 horas después de que falleciera Alberto Nisman, el fiscal que investigaba el atentado a la sede de la mutual judía AMIA.

Nisman fue sepultado el jueves pasado tras aparecer muerto el 18 de enero, con un balazo en la cabeza en su departamento, un día antes de su prevista comparecencia ante una comisión del Congreso para ahondar su denuncia contra la presidenta por el presunto encubrimiento de los iraníes acusados por el ataque que en 1994 causó 85 muertos.

La semana pasada la mandataria aseguró que Nisman fue asesinado y denunció un complot en su contra urdido por sectores de inteligencia, lo que generó críticas de la oposición y miembros del Poder Judicial.

Por su parte, el secretario general de la Presidencia reiteró ayer que la denuncia del fallecido Alberto Nisman por el Memorándum de Entendimiento con Irán “es una mentira atroz” y señaló que hay que decirle “a la sociedad” que “las cosas que están apareciendo” en la investigación sobre la muerte del fiscal indican que “esta es una maniobra de (el exdirector de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia Jaime) Stiuso”.

En la publicación de Página12 Aníbal Fernández afirmó: “Stiuso, es un personaje siniestro, que ha intentado por todos los medios perjudicar al Gobierno”.

Si bien los principales bloques opositores expresaron en principio su intención de no avalar el debate para la creación de la AFI, varios legisladores consideran que es mejor concurrir. El proyecto de ley divide las posturas en la oposición. Los bloques de Propuesta Republicana, la Unión Cívica Radical, el Frente Renovador y la coalición FA-UNEN, los principales bandos opositores, rechazaron abordar la iniciativa.

Sin embargo, ellos saben que el Frente para la Victoria (FpV) tiene la cantidad suficiente de legisladores, propios y aliados, para lograr el quórum y luego aprobar el proyecto.

El diputado nacional Horacio Pietragalla dijo a Prensa Latina que el FpV cuenta con las fuerzas para aprobar una reforma necesaria para fortalecer a la democracia argentina, y criticó a quienes utilizan el asunto para hacer política electoral.

El servicio Infonews indicó que diputados como el radical Miguel Bazze, miembro de la Comisión Bicameral de Fiscalización de Inteligencia, comenzaron a tomar distancia de aquella postura cerrada y ahora ven con buenos ojos debatir la nueva ley.

Por otra parte, no se conoce todavía la decisión del peronismo disidente y de otras fuerzas menores, pero se presume que podrían tener posiciones más flexibles y una mayor disposición a discutir el proyecto, señaló Infonews.

El objetivo del oficialismo es aprobar la ley a fines de febrero, antes del inicio del período de sesiones ordinarias del Congreso el 1 de marzo.

La iniciativa contempla que la creación de la AFI tendrá como función primordial garantizar la protección del Estado, sus dependencias y la Nación. Además, de velar y combatir lo que pueda lacerar al país como el terrorismo internacional, el narcotráfico, la trata de personas, los delitos económicos y cibernéticos, entre otros.

La reforma propuesta por Cristina Fernández es de gran dimensión política y profunda envergadura en la reestructuración de los servicios acusados a lo largo de los años de estar ligados con pares extranjeros, como la CIA y la Mossad, de Israel.

El senador Ruperto Godoy, quien integra la comisión de Justicia, explicó que “se busca mayor transparencia a través del control de las escuchas telefónicas, que estará a cargo de la Procuración General, para que no sirvan para extorsionar, para presionar”, citó diario El Tiempo.

Sobre la oposición, Godoy dijo que esos bloques tendrán “la oportunidad de debatir el proyecto e invitar a especialistas”. El oficialismo cuenta con los votos para aprobarlo, enfatizó el rotativo argentino.