En el Senado del Congreso de Colombia comenzó ayer el debate sobre la refrendación del acuerdo de paz que firmaron la semana pasada el gobierno de Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Ambas partes esperan que quede aprobado esta misma semana.

Mauricio Lizcano, presidente del Senado, detalló que el debate será incluyente. En él intervendrán el jefe negociador del Gobierno, Humberto De la Calle; los voceros de los partidos políticos, los miembros de la sociedad civil del Sí y del No, es decir, aquellos que están a favor y en contra del pacto de paz, y los senadores.

El acuerdo fue firmado la semana pasada en Bogotá por las FARC y el gobierno de Santos tras una serie de modificaciones al texto original, rechazado en un plebiscito a comienzos de octubre, para incluir propuestas de la oposición.

El Congreso fue elegido por las partes como medio de refrendación para acelerar la aprobación del pacto, que esperan sea validado,  tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes.

El fast-track

El fast-track o procedimiento especial para tramitar rápidamente la implementación de los acuerdos con las FARC solo podría ser posible si los colombianos aprueban los nuevos textos de paz a través de una refrendación popular. De acuerdo con la ponencia, si el Gobierno no lleva a las urnas el acuerdo final, las 25 normas que se requieren para implementar la paz tendrán que desarrollarse en ocho debates, como lo establece la Constitución y no en  cuatro, como se pretendía.

Según la publicación del diario El País, de Colombia, el jefe de la delegación de paz del Gobierno Nacional, Humberto De la Calle, dijo que el “fast-track no es por un capricho ni es un deseo de colocar contra la pared a quienes se oponen, es una necesidad”.

De la Calle aseguró que, si pasa mucho tiempo, es posible que los grupos guerrilleros vuelvan a los métodos ilegales: “Los caminos delincuenciales obvios, se llaman narcotráfico y extorsión. El día que extorsionen a un ganadero, ese señor pone una denuncia y llega la Policía; ese día puede haber muertos, y ese día se acabó el cese de fuego. Eso no resiste hasta diciembre”.

La oposición

Encabezada por el expresidente y actual senador Álvaro Uribe, la oposición rechaza el acuerdo alcanzado tras cuatro años de negociaciones en Cuba y también que la refrendación quede en manos del Congreso y no mediante una nueva consulta popular.

Para Uribe, el principal problema del acuerdo es que otorga elegibilidad política a guerrilleros culpables de crímenes atroces antes de que cumplan sus penas.

Al llegar a la plenaria, el presidente del Senado dijo: “Si terminamos hoy (martes) todo y no hay un senador más por hablar, votamos, y si no, pues tenemos el día de mañana (miércoles) para votar”.

De ser aprobado el pacto, el Congreso también será clave para validar las leyes que permitirán luego su implementación. (I)