La cumbre del G20 concluyó ayer en la localidad china de Hangzhou, tras dos días de deliberaciones
China insta a los líderes mundiales a terminar con el proteccionismo económico
La XI cumbre del Grupo de las 20 principales economías (G20) concluyó ayer en la ciudad oriental china de Hangzhou con consensos sobre mecanismos para defender la globalización y el libre comercio como fórmula para estimular el crecimiento, frente al proteccionismo que existe en varios países.
“Hemos acordado (...) apoyar un sistema comercial multilateral y oponernos al proteccionismo”, dijo el presidente chino Xi Jingping, cuyo país albergó durante dos días la cumbre del grupo en la ciudad de Hangzhou.
Durante la cita, Xi Jinping exhortó a los miembros del G20 a construir una economía mundial abierta y promover la facilitación y liberalización del comercio y las inversiones. “El proteccionismo es como beber veneno para saciar la sed”, dijo Xi. “El G20 debe oponerse con firmeza a la política de ‘fastidiar al vecino’ y debe defender y promover la construcción de una economía mundial abierta”.
Antes de la reunión de líderes del G20, cuyo tema es ‘Hacia una economía mundial innovadora, vigorizada, interconectada e inclusiva’, los líderes nacionales y jefes de organizaciones internacionales también alertaron en una cumbre empresarial sobre el actual movimiento mundial anticomercial.
Durante una sesión de la Cumbre Business 20 (B20) realizada ayer, el primer ministro de Australia, Malcolm Turnbull, apuntó al auge de los llamados populistas en muchos países de medidas proteccionistas y reconoció que restaurar la confianza pública en el comercio “es un desafío político significativo”. Ante esto, pidió a líderes empresariales y políticos hacer más para contribuir a un diálogo público sobre asuntos clave como comercio e inversión a fin de recuperar esta confianza.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, dijo que “existe la sensación de que la marcha del progreso se estancó” y que la preocupación conduce a “un proteccionismo anticomercial y antiglobalización desenfrenado”. “Tenemos que contrarrestar esto”, añadió.
Más contundente fue la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, que denunció los “ataques populistas” contra la globalización.
Roberto Azevedo, director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), dijo que la retórica anticomercial puede conducir a políticas erróneas y que la comunidad empresarial debe pronunciarse en su contra.
El jefe de la OMC pidió una mejor distribución de los beneficios del comercio y enfatizó la necesidad de incrementar la participación de las pequeñas y medianas empresas en el comercio porque estas representan la mayor parte de la fuerza laboral.
Las estadísticas de la OMC muestran que el crecimiento del comercio mundial se ralentiza de forma significativa desde 2008, de un promedio de más de 7% anual entre 1990 y 2008, a menos de 3% entre 2009 y 2015.
El año pasado fue el cuarto año consecutivo en el que la tasa de crecimiento del comercio mundial se ubicó por debajo del 3%.
En el texto final, el G20 también hizo referencia al dumping y a sus “efectos negativos sobre el comercio y los trabajadores”. La cuestión es delicada, sobre todo en China.
Europa y Estados Unidos han denunciado reiteradamente la cuestión del acero chino, que el gigante asiático vende a precios muy bajos en todo el mundo dañando a los productores locales. (I)