La Sistema nacional de Protección Civil de México declaró alerta roja en los estados de Puebla y Veracruz ante la cercanía en las próximas horas del huracán Katia de categoría 2. 

Katia tocará tierra la noche del viernes al sábado en Veracruz, donde sus habitantes lo esperan ya guarecidos y reponiéndose del susto por un poderoso sismo de 8,2 que causó más de 60 muertos en el sur de México.

Katia se encontraba hacia las 00H00 GMT a 210 kilómetros al norte del puerto de Veracruz, con vientos de 165 km/h, y avanzando hacia la costa del Golfo de México a 11 km/h, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.

El presidente Enrique Peña Nieto, quien se encontraba en Oaxaca (sur) atendiendo la emergencia generada por el terremoto, pidió a los habitantes de la costa del Golfo de México y del centro del país que "extremen precauciones" ante las fuertes lluvias.

"La entrada de Katia puede ser particularmente peligrosa en laderas afectadas por el sismo. Eviten estas zonas", escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
En Tecolutla, en la costa norte veracruzana, el potente silbido del viento y el intenso golpe del agua de lluvia era el creciente ruido de fondo para sus 8.000 habitantes, que se resguardan en casas, hoteles y algunos albergues preparados por Protección Civil.

Para los habitantes de Tecolutla, sin embargo, la mayor preocupación son las precipitaciones que se espera caigan en las zonas altas de la sierra oriental y que provocan peligrosas crecidas de ríos.

"Para que llegue lo peor nos va a llevar un lapso de tiempo mayor", dijo a la AFP Ricardo Pardiñas, de 35 años, nativo del pueblo y guía turístico, al explicar que los próximos tres días serán cruciales en la eventual crecida del río.

Sumado al huracán, el sismo de 8,2 grados del jueves revivió trágicos recuerdos de 1999, cuando otro temblor sacudió la zona días antes de que el pueblo fuera inundado.

Riesgo de inundaciones

"Ya tenemos encima el huracán y luego el temblor, pues más se asustaron", dijo a AFP, Daniel Salas, de 29 años, voluntario de Protección Civil mientras clavaba tablones sobre las ventanas y puertas de su casa,

Los huracanes o tormentas tropicales golpean Veracruz al menos una vez por año, generando en ocasiones graves inundaciones y deslizamientos por su terreno montañoso y numerosos ríos.

"Estamos sobre todo en alerta por el río", dijo Amanda Santiago, comerciante de 39 años, cuya vivienda y venta de artesanías está a escasos 50 metros de la ribera.

Calles adyacentes al río Tecolutla están bloqueadas por decenas de botes turísticos que fueron retirados del agua para evitar que sean arrastrados por la eventual crecida.

En el centro y norte de Veracruz, que se extiendo sobre una amplia franja costera del Golfo de México, autoridades buscan proteger a más de un millón de personas en riesgo por Katia.

El área de impacto del huracán está hacia el norte del importante puerto de Veracruz y cerca de la ciudad de Tuxpan.

Su alcance de vientos de tormenta es de unos 110 kilómetros, unas tres veces menor que el gigantesco Irma, de categoría 4, que avanza por el Caribe hacia Florida.

Katia es el tercer fenómeno ciclónico simultáneo en el océano Atlántico, junto con Irma y José, también de categoría 4, según el NHC.

México es uno de los países más vulnerables al embate de huracanes, con al menos una decena al año, por su ubicación geográfica y su amplia línea costera, tanto en el Pacífico como en el Atlántico.

Hace una semana, la tormenta tropical Lidia dejó siete muertos en el estado de Baja California, en el noroeste de México. (I)