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Un accidente en la Metrovía le truncó las metas y sueños a Lady Freire

Al día siguiente del accidente, amigos familiares y vecinos de la fallecida protestaron en el sitio del percance.
Al día siguiente del accidente, amigos familiares y vecinos de la fallecida protestaron en el sitio del percance.
Foto: Eduardo Escobar / El Telégrafo
25 de junio de 2016 - 00:00 - Édison Mendoza y Alexandra Marcillo, estudiantes de la ULVR

“La dejé en la estación de la Metrovía para que no le pase nada y miren lo que ocurrió”.

Con estas palabras, Fernando Palacios, de 27 años, y novio de Lady Freire Sornoza, quien murió hace  2 semanas al caer de un bus de la Metrovía, describe los últimos minutos que pasó con su enamorada.

Asegura que tras despedirse de ella y dejarla en la estación de buses fue para su casa y esperó a que la joven se conecte a las redes sociales, como solía hacerlo siempre.

“Esperé 15 minutos, era el tiempo en el que llegaba siempre a su casa y luego chateábamos, pero se me hizo raro que no se conectó”.

La preocupación empezó a apoderarse de él. Luego de 1 hora recibió la llamada de la madre de Lady, quien le comunicó la fatal noticia.

“Corrí desesperado a buscar a mi hermano para que me traslade hasta la estación de la Metro y cuando llegué al sitio del accidente no podía creer lo que vi”.

Respiró profundo y le pidió fuerzas a Dios para entender lo que estaba pasando, mientras el cuerpo de su enamorada seguía tendido en la calzada. Ella tenía muchos planes que se truncaron con la tragedia.

“Íbamos a cumplir un año en agosto y ella soñaba con poner un negocio de batidos a 2 cuadras de su casa. Ya habíamos averiguado costos para montarlo en 2 meses.

El propósito era ayudar a su familia.

Aspiraciones de la joven    

Lady se incorporó de bachiller en el colegio Mariana de Jesús y quería estudiar Fisiatría en la Universidad de Guayaquil. Se estaba preparando para rendir las pruebas de ingreso el próximo mes. Su aspiración era graduarse y trabajar para ayudar a su padre, quien hace poco estuvo hospitalizado. Él tiene complicaciones en la columna vertebral y se moviliza en silla de ruedas.

Carolina, la hermana mayor, dice que Lady era amante de los animales y que cada fin de semana jugaba baloncesto. Con este deporte había ganado muchas medallas.

Los vecinos la querían mucho y  están dolidos por el accidente.

“Desde la noche del percance se agruparon y decidieron hacer un plantón para que se haga justicia. Hasta el momento no hemos recibido ni las condolencias de parte del consorcio”, expresa.

Destaca que la esposa del chofer que conducía el bus que atropelló a Lady se acercó a darle el pésame, durante la audiencia. Asegura que llegarán hasta las últimas consecuencias para esclarecer el caso y solicita la ayuda de algún pasajero que viajaba ese día en la Metrovía. “Queremos saber qué aconteció”.

El chofer a la Penitenciaría

Jaime Ch., conductor del articulado que arrolló a Lady Freire, permanece detenido en la Penitenciaría del Litoral, mientras su esposa Mery Pilay, de 33 años, continúa con los trámites para demostrar la inocencia de su conviviente. Ella exige justicia y pide que se hagan las investigaciones del caso.

“Está preso un padre de familia que le hace falta a sus 5 hijos, ya no sé qué excusa decirles, ni cuándo regresará a casa. Mi hijo, de 8 meses necesita leche, pañales; él es el sustento nuestro. No hemos recibido respaldo de la empresa en la que labora desde hace 8 años.

Él llamó al 911 para que asistieran a la chica y detuvo el carro al escuchar a los pasajeros”.

Máximo Guaranda, secretario del Sindicato de Choferes de Metroquil, afirma que apoyan al chofer del bus. Explica que han tratado de reunirse con los directivos del Consorcio para buscar la forma de ayudar al compañero y no han tenido respuesta.

“El lunes y martes, (de la semana pasada) tratamos de hablar para que como empresa autorice a que el sindicato contrate a un abogado que defienda a nuestro compañero, pero no nos atendieron”.

Guaranda asevera que el accidente se originó al  romperse una de las mangueras de presión de aire de la puerta. “Eso le corresponde solucionar al Consorcio Metroquil”.  Este hecho se produce por una falla de la empresa y también de la Metrovía, que es un ente regulador para los consorcios”.

Joselito Argüello, abogado del conductor del bus, por pedido del sindicato de trabajadores de Metroquil, indica que ya adelantó las acciones en favor de su cliente.

“Hemos planteado de forma inmediata la petición de señalamiento de fecha  y hora al juez de Garantías Penales que conoce la causa para discutir la procedencia de revocatoria o la  sustitución de la medida de prisión preventiva que pesa en contra del chofer”, acota.

Argüello manifiesta que la eliminación de las rampas de seguridad, que sirven como dispositivo para que las puertas no se abran, fue una disposición de Metroquil.

Según César Carranza, presidente del Consorcio Metroquil, se está elaborando un informe técnico para tomar precauciones para estos casos no se repitan.

La Fundación Metrovía mantiene una campaña sobre el adecuado uso del sistema y viene realizando una encuesta a la ciudadanía acerca de los servicios que prestan. (I)

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