La educación a los estudiantes busca reducir el número de los accidentes

Las malas conexiones externas (calle - vivienda) y las instalaciones internas (cableado intradomiciliario) siempre han generado problemas: cortocircuitos o  sobrecalentamientos.

Francisco Estarellas, gerente general de la Empresa Eléctrica de Guayaquil, detalla que las fallas más recurrentes en las instalaciones eléctricas tienen puntos críticos.

El primero es el uso incorrecto de los cables de electricidad. En muchas viviendas, explica, se observa que los residentes utilizan cualquier cable, incluso hasta de teléfono, en reemplazo de otro tipo de conductores.

“Se conectan demasiados aparatos eléctricos en un solo enchufe, lo que origina sobrecargas. Muchas viviendas no tienen  breakers,  unen los cables de manera antitécnica y no cuentan con varilla de tierra, que es un instrumento técnico que evita que un cortocircuito dañe los aparatos eléctricos. La sobrecarga se va a tierra y no pasa nada”.

Estarellas asegura que la Eléctrica de Guayaquil trabaja permanentemente, en diferentes sectores de la
ciudad, con el programa ‘Mingas eléctricas’, con el que atiende  las inquietudes de los clientes en el mismo sitio.

Además, acota, se hace recomendaciones a las familias como usar materiales apropiados para realizar una instalación.

En 2014, de acuerdo con la entidad, han recorrido 80 sectores; mientras que en 2013 visitaron 200 barrios. Asimismo, la capacitación se extendió a 120 planteles educativos. La idea, informa la entidad, es que los estudiantes recepten el mensaje y lo repliquen en sus hogares.

También se muestra cómo se debe hacer una instalación en casas donde hay electrodomésticos básicos  comuna refrigeradora, un televisor, un equipo de sonido y un ventilador. “Ahí se necesita de cables alojados en tuberías metálicas, que por lo menos tengan dos breakers, su varilla puesta a tierra, y que utilicen material de buena calidad”.

Sin embargo, los problemas eléctricos no solo se producen desde el momento que se  empieza a trabajar en la instalación. Las redes eléctricas requieren de mantenimiento, revisar los cables y los empalmes. También es necesario hacer un rediseño eléctrico.

“No hay que olvidar que las familias crecen en número y eso demanda mayores servicios que muchas veces también requieren de mayores cargas eléctricas”. De ahí la necesidad de cambiar cables y tomacorrientes obsoletos.

“Hay que tomar en cuenta que existen viviendas con treinta o cuarenta años de antigüedad, donde no se han cambiado los circuitos y no hay un debido balanceo en cuanto al voltaje que puede soportar el cableado”.  

Un factor importante es la calidad de los materiales que se utilizan porque de ellos depende la resistencia que tengan al momento de una sobrecarga.