El ingenio y las ideas que nacieron para ayudar a los damnificados del terremoto

Una exhibición fuera de lo común con un ambiente acogedor, luces tenues resaltando los colores y la creatividad de los cuadros fue lo que pudo verse en cada una de las ilustraciones de Carteles de Esperanza, muestra organizada por Ricardo Wilson y Ericka Coello.

La idea de esta exposición surgió a partir de la solidaridad y el apoyo por parte de todos los ecuatorianos que de alguna u otra manera empezaron a colaborar en favor de los damnificados de Manabí y Esmeraldas. “Era nuestro turno”, dijo Wilson, quien junto a su colega dirige la compañía de ilustraciones Dos Cabezas. Ante lo ocurrido el día del terremoto se preguntaban qué podían hacer para aportar con su granito de arena a esta noble causa. “Somos diseñadores gráficos y lo que vimos desde el primer instante me motivó. Ese sentimiento de solidaridad que se veía en las redes sociales era digno de admirar”, manifiesta Coello.

Por esa razón, junto a otros diseñadores, se reunieron y empezaron a trabajar en imágenes que movieran los sentimientos de ayuda con frases motivadoras. Tomaron como referencia lo icónico del país.

En algunas se muestra al cóndor con lágrimas, o la silueta de Ecuador partido por la mitad y a los lados unos brazos que reflejan su multiculturalidad. Algunas de estas imágenes fueron publicadas en las redes sociales y recibidas con total aceptación por los usuarios. “Veíamos los likes y miles de ‘comparticiones’. No dudamos en realizar una pequeña galería con los mejores diseños para que la gente pudiera verlos más de cerca”, dijo Wilson.

El tiempo estaba en contra y la organización apenas tuvo dos semanas, sin embargo, todas las personas involucradas en el evento dedicaron tiempo y esfuerzo para así demostrar que nadie es inútil y que si se tiene la predisposición la ayuda siempre es bienvenida. Además era necesario que el evento se realizara para que el espíritu de donar no decayera. Para ingresar a la exposición, cada persona debía apoyar con alimentos e insumos para niños; el objetivo primordial era recaudar estos tipos de artículos para formar ‘baby kits’.

Carmen De la Torre, espectadora del evento, dijo que “…los niños necesitan de ciertos alimentos especiales, vitaminas y lo importante es apoyar”. También se podía ayudar adquiriendo a un módico precio las camisetas con la silueta de Ecuador y en el centro el lema de #Fuerza Ecuador.

Todo por ayudar

La exhibición de los carteles no solo fue en Guayaquil, pues se hará en distintas ciudades del país, con el fin de concienciar y sensibilizar. ‘Sigamos ayudando’ dijo Wilson, mientras hacía gestos con sus manos dando énfasis a estas palabras. “Esto aún no se acaba, apenas estamos afrontando los primeros meses de lucha, sin embargo, somos un país lleno de personas positivas y con un corazón inmenso”, acotó. Esta exposición de carteles tiene como fin primordial “dar esperanza”.

Una de las tantas frases que aparecen en los carteles y que ocasiona impacto es ‘El temblor pasa, los abrazos quedan”. Carmen Esteves, aficionada al arte y la pintura, dijo que la iniciativa era necesaria y muy creativa, además recalcó el gran impulso que significaron las redes sociales debido a que muchas de las imágenes ya había visto en Facebook o Instagram, pero verlas en la pared genera más sentimiento.

La gente se acercaba a los cuadros, y se quedaba viendo e interpretando cada uno de los diseños que se presentaban. Personas de todas las edades asistieron y más de una derramaron lágrimas.

La gente se fijaba en todo, podía tocarlas y darse cuenta de que no eran pinturas sino impresiones elaboradas en computadora, pero que tenían los elementos principales para impresionar a los asistentes.

Unas usaban colores vivos, otras una escala de grises, distintos tipos de letras, figuras icónicas como el cóndor, la silueta de Ecuador, pero todas con el tricolor. Se lo usó como sello de identidad.

Carteles de Esperanza empezó como una idea de dos jóvenes deseosos de ayudar, pero ahora saben que más que una idea es una realidad que converge a muchos más. “Por el momento estamos enfocados en este proyecto, ya veremos qué otro ataque artístico se nos viene a la mente para así seguir ayudando con lo que más nos gusta, aseguró Wilson. Con aplausos emotivos terminó la exposición que recaudó mucho más de lo estimado.

Las donaciones serán empaquetadas y llevadas al Benemérito Cuerpo de Bomberos para que las haga llegar a las familias que más lo requieran. La siguiente parada de la exposición de los Carteles de Esperanza será Quito, pero se espera llevarla a diferentes ciudades del país con el objetivo de ayudar a Manabí. (I)