La Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífero (ARCH) informó que ha intensificado sus controles para garantizar la normal comercialización de la gasolinas y el diésel. Desde este lunes 27 de agosto, que entró en vigencia el nuevo precio de la gasolina súper, no se registraron novedades en su distribución.

La ARCH alertó a la ciudadanía que las estaciones de servicio deben despachar con total normalidad diésel, extra y súper. Cualquier denuncia se la puede realizar al 1 800 565 8786.

En un recorrido realizado por EL TELÉGRAFO por cuatro distribuidoras de la capital de diferentes empresas, los despachadores coincidieron en que la venta de gasolina extra aumentó, mientras que la comercialización de súper se redujo un 50%, aproximadamente.

Entre los consumidores se registraron opiniones divididas. Alberto Padilla, quien desde este lunes 27 de agosto cambió la gasolina súper por la extra. “Estoy restringiendo el uso del vehículo al máximo. Cambié a extra y no noto mayor diferencia en la potencia del auto, pero sí se consume el combustible más pronto”, afirmó este usuario.

Elías Durán, conductor de taxi, considera que debe haber una reducción paulatina del subsidio a los otros combustibles. A pesar de ello optó por adquirir extra porque con sus recursos no alcanza a llenar su vehículo con súper.

El ciudadano Marco Coello también migró a extra por un tema de presupuesto y aseguró conocer los efectos mecánicos que esto pueda traer a su auto. “Debido al cambio, el rendimiento del vehículo se va a dañar, pero hay que cuidar la economía del hogar. Posiblemente el dinero que ahorre por comprar extra lo utilice para la realización del mantenimiento técnico”, señaló el conductor.

Por el contrario, Xavier Cifuentes no ha pensado si quiera en utilizar otro tipo de gasolina de menor octanaje para su vehículo, pues considera que al tener un vehículo pequeño, con motor 1.300, tendría que pagar $ 3 o $ 4 más por cada tanqueada. Mientras que una lavada de inyectores, mantenimiento o reparación del motor le saldría mucho más caro.

El usuario considera que la eliminación del subsidio del combustible es necesaria, pero se debe realizar por modelo de auto, pues considera que vehículos cuyo costo supera los $ 50.000 emplean diésel y allí no ha habido variación del precio.

La Eco País es una opción para los guayaquileños

Un panorama similar se observó en Guayaquil. Los administradores de estos negocios coincidieron en indicar que sí se ha notado una migración de clientes hacia gasolinas más económicas, aunque esperaban cerrar el día para hacer una evaluación más detallada.

“Si antes teníamos en las primeras horas de la mañana 10 conductores que consumían gasolina súper, ahora son dos”, dijo Gina Mero, despachadora de una gasolinera Petroecuador en el centro de la urbe.

Varios ciudadanos entrevistados aseguraron que se cambiarán a la gasolina Eco País para ahorrar recursos. Por ejemplo, Carlos Quiroz llenó el tanque de su camioneta con este tipo de gasolina que emplea en su producción elementos orgánicos como el maíz y la caña de azúcar.

El usuario considera que este combustible es de buena calidad y que no le ha provocado inconvenientes en sus tres vehículos, uno de ellos de alta gama.

Otras personas, como Andrés Fajardo dijeron que continuarán comprando súper para evitar el daño del motor de su motocicleta. El hombre, quien utiliza su vehículo para trabajar, manifestó que gastaba $ 10 semanales en este combustible y que ahora cree que gastará unos $ 15.

El Gobierno espera un ahorro de cerca de $ 120 millones por subsidio a este combustible. El ministro de Economía, Richard Martínez, en una entrevista realizada este lunes 27 de agosto por Telediario insistió en la necesidad de focalizar los subsidios a los combustibles, de manera que lleguen a los sectores que más lo necesitan.

La gasolina súper con 92 octanos empezará a comercializarse una vez que las estaciones despachen el producto anterior.  (I)