Las iniciativas de pequeños negocios, en algunos casos informales, surgen como una alternativa para generar ingresos propios ante la pérdida de un trabajo fijo. También se crean por la necesidad de independencia laboral.

El informe Global Entrepreneurship Monitor (GEM) 2015, publicado en junio de 2016, ubicó a Ecuador como el segundo país que más emprende en el mundo.

El Índice de Actividad Emprendedora Temprana del país (TEA, por sus siglas en inglés) fue de 33,6%, lo que significa que uno de cada tres adultos ha desarrollado actividades ligadas al emprendimiento o tenía un negocio que no superaba los 42 meses de existencia.   

Leonardo Agustín Magno creó en 2012 la marca de textiles Manttra, junto a su mamá, y otra mujer hábil en la confección, después de dos intentos fallidos de incursionar en el mundo de los negocios y luego de pasar más de un año sin conseguir trabajo fijo.

Actualmente la marca se especializa en la confección de ropa de cama hotelera, llegando a más de 700 establecimientos. Nueve personas dependen de este negocio.

El presidente de la Asociación de Emprendedores, Héctor Velasco, manifestó que es habitual notar más interés en emprender por cuenta propia cuando la situación económica del país no atraviesa su mejor momento.

De acuerdo al informe GEM, el 23,1% de los consultados en el país afirmó haber emprendido aprovechando una oportunidad, mientras que 10,3% lo hicieron por necesidad. El ecuatoriano es un emprendedor natural, describe Velasco.

Las ideas de negocio generalmente salen de un estudio superficial de mercado con familiares y amigos. También nacen con el afán de desarrollar una habilidad.

Por las condiciones como inician estos negocios, a su juicio, quienes están detrás podrían ser considerados dentro de la categoría del subempleo.

Sin embargo, advirtió, es una interpretación que observan las cifras de empleo sin examinar a profundidad la situación de las personas calificadas como subempleadas.

De diciembre de 2007 al mismo mes de 2016 este rubro fluctuó entre 1’155.872 y 1’564.825 personas. En 2012 se registró la cifra más baja, con 603.890 subempleados. De ahí también se desprende, a diciembre de 2016, que el 44,7% son asalariados y el 55,3% son independientes.

Lolita Hurtado vende empanadas de la marca Q’Rico, la cual surgió en 2013 para enfrentar dificultades  económicas. Ahora el negocio da trabajo a dos personas.

Paula Dormi, en cambio, genera más ingresos para su hogar vendiendo almuerzos a 30 oficinistas de tres diferentes empresas. La venta informal empezó hace más de un año y ahora proyecta, en el corto plazo, poner un establecimiento fijo en Guayaquil.

En internet existe la página www.elemprendedor.ec, la cual difunde proyectos y noticias relacionadas al tema en el país. Los emprendedores aconsejan instruirse en contabilidad y, sobre todo, ser pacientes para conseguir resultados. (I)