Con la firma del contrato de explotación minera a gran escala realizada, el pasado lunes, en el Palacio de Carondelet entre el Gobierno y la empresa china Ecuacorriente S.A. (ECSA), el Ecuador dará paso a iniciar estas actividades mineras, pero con responsabilidad y respeto al ambiente. Así lo dio a conocer el titular del Ministerio de Recursos Naturales No Renovables, Wilson Pástor.

Trabajos de extracción que comenzarán  en  2014, después de que se construya la infraestructura necesaria para esta labor en los próximos 25 años.

Este contrato  dará paso a la explotación del proyecto Mirador, ubicado en la parroquia Tundayme-El Pangui, provincia de Zamora Chinchipe.

Ya hay acuerdos entre las partes en lo que se refiere al pago de   regalías (porcentaje de las ganancias obtenidas por la venta de la producción), las obligaciones de cancelar el Impuesto a la Renta (IR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA). Además de estar sujeto  a posibles sanciones en caso de causar inconvenientes a la sociedad y el ambiente (ya que podría perder los permisos de operación).

El ministro de Recursos Naturales No Renovables, Wilson Pástor, manifestó que por concepto de las regalías el Estado recibirá el 52% de las ventas del cobre, recursos que serán invertidos en obras prioritarias en la localidad en la que  se extrae el mineral.

Ante esto, el  indicó que se analiza otorgar el 100% de las regalías para que  se  invierta en las zonas donde  se desarrollarán los proyectos “hasta que se haya superado la pobreza”. Posteriormente se hará transformaciones profundas   en otros sectores del país que requieren.

Con la suscripción del contrato, el Estado ecuatoriano ha logrado que reconocidas empresas internacionales inviertan en el país. “Tenemos que encontrar socios fuertes”, manifestó Pástor, al tiempo de destacar que Ecuacorriente está conformada por las compañías chinas Tongling Nonferrous Metals Group Holdings y China Railway Construction.

Informó que la  primera empresa se encarga de la construcción de la red ferroviaria de China, como   de autopistas, trenes bala. Edificó los túneles más grandes bajo los ríos Yanse y Amarillo, tiene más de 60 proyectos en el mundo y  24.171  millones de dólares en inversión pura, posee una capacidad minera de 80 millones de toneladas al año.

La otra compañía es la primera   que inició en China la explotación de cobre a gran escala, con 60 años de vida, trabaja en Canadá, tiene 26.000 empleados  y posee el centro minero más grande en ese país. Se caracteriza por tener tres megaproyectos a cielo abierto.

El funcionario indicó que el precio base de la libra de cobre es de 4 dólares, al agregar que al valor actual  los beneficios para el Estado superarán los 2.774 millones de dólares, además de que se generarán alrededor de 3.100 plazas de trabajo   directo e indirecto.

Puesto que en la mina laborarán específicamente 1.500 personas, entre nacionales y extranjeros, pero a un mediano plazo se estima que “el 80% de trabajadores sea de  mineros nacionales y el 20%, extranjero”, anunció el viceministro Federico Auquilla.

Según las estimaciones, Mirador tiene como reservas recuperables 4.738 millones de libras de cobre y para la explotación, la compañía ha comprometido una inversión inicial de 1.400 millones de dólares en los primeros cinco años. La producción iniciará a finales de 2014.

En tanto, el  ministro Pástor  explicó que la compañía ECSA entregará 100 millones de dólares, que serán consignados de la siguiente manera: 40 millones de dólares cuando se  apruebe   el contrato de inversión, un pago de 30 millones de dólares cuando obtengan los permisos de la Secretaría Nacional del Agua, de Patrimonio Cultural y del Ministerio del Ambiente, y un tercero   de 30 millones de dólares cuando esté construida la planta de generación eléctrica que estará conectada con la mina.

El dinero obtenido como regalía anticipada será para financiar el desarrollo de proyectos productivos y  sociales en las zonas aledañas al proyecto minero.

Auquilla mencionó que se trabaja con las autoridades del cantón para   implementar varias obras,  como   crear un hospital, escuela del milenio y otras de infraestructura básica. Primero se apoyará a las comunidades donde se realizará la explotación minera y luego en el resto de  Zamora Chinchipe y en las provincias vecinas,    Loja, Azuay y Morona Santiago.

Aquí, el viceministro hizo una observación respecto a que  “existe el firme compromiso de ver luego de 25 años a una provincia amazónica con un estándar de vida acorde a los recursos minerales de la que es poseedora y ha podido vender, por el interés que hay de empresas transnacionales”.

Respecto a la licencia ambiental para el proyecto, la ministra de esta cartera de Estado, Marcela Aguiñaga, señaló que Ecuacorriente cuenta con los permisos respectivos para operar. Aseveró que el control de la operación minera se lo ejecutará como a cualquier contrato o proyecto.

“El Ministerio obliga a la empresa que tenga algunas obligaciones, como por ejemplo   monitoreos permanentes de agua y suelo para verificar procesos de contaminación, en el caso de que hubiese”, recalcó Aguiñaga.

Enfatizó que el impacto que genera un proyecto a cielo abierto es la pérdida de vegetación, es decir que habrá un hueco y   pérdida de vegetación primaria. Luego de que concluya la explotación y se cierre la mina, la empresa tendrá que entregar el lugar en las condiciones en  las que lo recibió.