La sorpresiva eliminación de Serena Williams en la tercera ronda de Wimbledon a manos de la francesa Alize Cornet, ha abierto un interesante debate, ¿está pasando la número 1 del mundo por un mal momento?, ¿o es el comienzo del fin de su brillante carrera profesional?

La norteamericana dominó el circuito femenino en 2013, ganando el torneo de Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos; además cerró la temporada pasada con un envidiable registro de 78 victorias y apenas 4 derrotas.

La gran mayoría pensaba que la presente temporada sería nuevamente dominada por Serena, con su tenis agresivo, su potente servicio y su gran capacidad atlética, sin embargo cuando ya se han jugado 3 de los 4 torneos de Grand Slam de la temporada 2014, la realidad es totalmente diferente.

Serena no ha conseguido llegar siquiera a cuartos de final en ninguno de los 3 torneos, algo decepcionante para las altas expectativas de la prensa, del público, y en especial de ella.

Comenzó el 2014 con victoria en el torneo de Brisbane, pero en el primer grande del año, el Abierto de Australia, cayó en la cuarta ronda contra la tenista Ana Ivanovic. En su momento se lo tomó como un traspié que puede ocurrirle a cualquiera, y no se dramatizó sobre el tema.

Su siguiente participación fue en Dubái , donde fue eliminada en la fase de semifinales contra Cornet, pero se recuperó y ganó el torneo de Miami, luego en Charleston fue derrotada en la primera ronda por la eslovaca Jana Cepelova, en Madrid se retiró en cuartos de final por una lesión en su pierna izquierda, una semana más tarde gana el título en Roma, llega a París como la gran favorita, pero es ampliamente superada en la segunda ronda por la hispano-venezolana Garbiñe Muguruza, tras esa estrepitosa caída Serena prometió trabajar más duro aún y se puso como meta ganar su sexta corona en Wimbledon, pero tras un primer set arrollador, terminó perdiendo los 2 siguientes y sufrió una nueva decepción frente a Cornet que la derrotó por segunda vez en pocos meses.

Para empeorar las cosas, unos días más tarde, jugando dobles junto a su hermana Venus, se retira a causa de un extraño virus, tras cometer 4 dobles faltas consecutivas, y abandona la cancha nerviosa y entre lágrimas.

Se especula sobre cuál será el futuro deportivo de Serena, ganadora de 17 títulos de Grand Slams en individuales, sin duda una de las mejores tenistas de la historia, y de quien se esperaba que continuara su reinado durante algunas temporadas más.

Pero Williams está a pocos meses de cumplir 33 años, y el paso del tiempo es el peor enemigo de los deportistas de alto rendimiento, y en un deporte individual como el tenis, con una altísima exigencia física y mental, un deportista a esa edad ya es considerado ” viejo ”.

A pesar de su temprana eliminación en Londres, Serena se mantendrá en el primer lugar de la clasificación mundial, pero tendrá una gran presión sobre sus hombros cuando comience la temporada sobre canchas de cemento en Estados Unidos, pues deberá defender la gran cantidad de puntos que ganó en la temporada 2013, especialmente con su triunfo en el US Open.

Serena es la quinta jugadora en la historia en lo que a títulos individuales de Grand Slam se refiere, superada solamente por los 18 de Martina Navratilova y Chris Evert, los 22 de Steffi Graf, y los 24 de Margaret Court.

Superar a 2 grandes como Evert y Navratilova, y por qué no a Graf y a Court -aunque será muy difícil -, puede ser la motivación que necesita en este momento, con casi 20 años en el circuito, con tantos triunfos importantes, y más dinero en el banco del que pueda gastar el resto de su vida, es vital para ella encontrar nuevos retos y motivaciones, y definitivamente apuntar a superar a leyendas como ellas sería un gran aliciente.

Las cosas no se le van a poner más fáciles a Serena, están apareciendo tenistas jóvenes con gran potencial, como la canadiense Eugenie Bouchard, la rumana Simona Halep, finalistas de Wimbledon, la misma Muguruza, que ya no la ven como una jugadora invencible, es decir ya no podrá ganar tantos partidos como antes, por ese factor de intimidación, o como se dice popularmente “con la camiseta”.

Pero Serena es una gran campeona y una gran competidora y no va a ceder su reinado sin dar pelea seguramente en el Abierto de Estados Unidos veremos a Serena nuevamente con hambre de gloria.