Roberto Ibáñez lideró la mañana del lunes la primera sesión del nuevo directorio de la Federación Deportiva del Guayas (Fedeguayas).  

Allí se designó a Washington Guerrero como nuevo administrador y representante legal de la entidad deportiva provincial más grande del país, que aglutina a 24 ligas cantonales, cuenta con un presupuesto anual de $ 6 millones, aproximadamente, y que tiene 3.430 deportistas federados.

Su primer paso es tener un diagnóstico claro de la situación administrativa y económica de la institución. A Fedeguayas no llegan los recursos hace tres meses. Dice que su proyecto apunta a ocho años (dos períodos), por lo que aspira a una eventual reelección. 

Anhela que al final de su gestión Fedeguayas sea un organismo más sólido y organizado; sin pugnas políticas y que no haya la necesidad de cercos policiales durante las elecciones. Una institución sin caudillismos y con dirigentes comprometidos.   

Inmediatamente después de su posesión empezaron a surgir cuestionamientos hacia usted en redes sociales. En uno de ellos se intentaba descalificarlo por ocupar varios cargos: presidente de la Federación Ecuatoriana de Judo, de la Asociación Provincial de Jiu-jitsu y ahora de Fedeguayas. Además, representante de deportistas en el COE. ¿Cómo responde usted a esto?

Siempre he creído en las capacidades de la gente y si yo tengo la capacidad para aportar lo que sé desde diferentes frentes, no veo el impedimento. Quienes me cuestionan deben entender que no soy empleado en estos organismos deportivos, sino su presidente y tengo mi equipo de trabajo. Mi papel es hacer seguimiento, dar disposiciones y lineamientos para que se ejecuten.

Ya no soy miembro del directorio del Comité Olímpico Ecuatoriano porque pedí licencia en 2017 cuando entré a la Secretaría del Deporte. Y cuando salí de la Secretaría en 2019, nunca fui convocado a una reunión de directorio; por eso presenté mi renuncia. Ya no soy el representante de los deportistas en el COE. Cuando fui electo presidente de Fedeguayas pedí licencia en la Asociación de Jui-jitsu y asumió el vicepresidente.

Así que no es cierto lo que se afirma en las redes.  

¿Cuál es su prioridad ahora, en el inicio de su gestión?

La salud de los deportistas que se encuentran en situaciones vulnerables debido a la pandemia por el coronavirus. Vamos a establecer convenios para darles alimentos, vitaminas y medicinas a nuestros deportistas. En esta emergencia repartimos kits de comida a los deportistas con dinero que salió de mi bolsillo. 

¿Cómo recibe la institución en lo administrativo y financiero?

Esta semana espero tener un balance más claro sobre la real situación de Fedeguayas. Estoy pidiendo información sobre el estado de los escenarios deportivos, principalmente sobre la pista atlética del estadio Modelo. Le he pedido al administrador que analice puesto por puesto para saber si hay o no exceso de personal. Planeamos realizar también una auditoría que se deberá efectuar con fondos privados, no con públicos.

Hay deudas de servicios básicos. Pero para eso fui elegido, para solucionar todos esos problemas. 

Tengo entendido que Fedeguayas no recibe asignaciones del Estado desde marzo pasado. ¿Cómo ha subsistido la institución y sus 260 empleados en estos últimos tres meses? 

No han llegado las asignaciones de abril, mayo y junio; esperamos que el Ministerio de Finanzas lo solucione pronto. No sé sinceramente cómo ha subsistido la institución sin dinero porque su colchón financiero era la autogestión a través del alquiler de los escenarios para conciertos y eventos; ese rubro generaba un ingreso anual de $ 1,2 millones aproximadamente, pero hoy no existe porque la emergencia sanitaria detuvo todo. (I)