Seguramente los socorristas con quienes compartía los pasillos de la Compañía de Bomberos N° 34 de La Punta lo ven ahora en televisión y se sienten contentos por ‘El Hombrecito’, el vecino que los saludaba cuando entraba o salía de la casa que colindaba con el cuartel. Eran los tiempos en los que Jorge Sampaoli, por la falta de presupuesto del Sport Boys de Callao (Perú), aceptó residir en un inmueble junto al Cuerpo de Bomberos.

‘El Hombrecito’, así le decían los efectivos de la casaca roja debido a lo flaco y pequeño que se veía. Sport Boys fue el segundo equipo que dirigió en Perú, antes lo hizo en el Juan Aurich y luego en el Coronel Bolognesi y el Sporting Cristal, cerrando su primera etapa fuera de Argentina entre 2002 y 2007.

Siempre fue irreverente. Las reseñas biográficas escritas sobre él aluden la vez en la que después de ser expulsado de la banca se subió a un árbol para seguir instruyendo a los futbolistas del club Alumni. Dicho elenco, que participa a nivel amateur en su natal Casilda (provincia de Santa Fe), le permitió debutar como entrenador tras abandonar su carrera de jugador a los 20 años de edad por lesiones en la tibia y el peroné.

Nacido el 13 de marzo de 1960, Sampaoli jamás dejó que los malos momentos lo alejaran del balompié, por eso, mientras daba sus primeros pasos como técnico y el dinero no le alcanzaba para vivir, alternó su tiempo con otros empleos. Durante muchos años se desempeñó como cajero del Banco Provincia y después laboró en calidad de juez de paz en un registro civil, donde tramitaba los casamientos y las actas de defunción.

La oportunidad de trabajar en el fútbol profesional le llegó a finales del 90, cuando firmó con el club Argentino de la Primera B Metropolitana de Rosario, al que orientó hasta 2000. A partir de ahí su perfil subió como un globo aerostático. Además de los planteles peruanos, en su currículum constan el O’Higgins de Chile (2008-2009), Emelec de Ecuador (2010) y la Universidad de Chile (2011-2012), hasta recalar en la selección de Chile en diciembre de 2012. Su llegada a ‘La Roja’ tiene como antecedente principal la consecución de la Copa Sudamericana de 2011 con la ‘U’ de Chile.

En Emelec dejó gratos recuerdos. El volante Polo Wila (27 años) del Olmedo, quien estuvo bajo su mando en 2010, califica a Sampaoli como un ‘enfermo’ del balompié, a quien no le importa desvelarse para estudiar a un adversario o perfeccionar una táctica. Ni en los compromisos sociales dejaba de hablar de fútbol. Su idea de juego profundo y vertical, de presionar al contrario desde la salida, se impregnó tanto en el ‘bombillo’, que quienes se aleccionaron con él tardaron en adaptarse a otro estilo. Esa necedad es la que le permitió a Chile ser tercera en la Eliminatoria regional y clasificar a Brasil 2014 y ahora le hace soñar con ser campeona del planeta.