El gol número 2.300 de los mundiales, cuya historia comenzó el 13 de julio de 1930 y en la actual edición irá hasta el 13 de julio de 2014, fue marcado por Jermaine Jones, el mediocentro de la selección de Estados Unidos nacido hace 32 años en la ciudad alemana de Fráncfort del Meno.

El primer gol en un Mundial fue marcado hace 84 años por el francés Lucient Laurent, en la apertura de Francia 1930 que los Bleus ganaron a México por 4-1 en el estadio Pocitos, de Montevideo. Jones, quien jugó en las selecciones juveniles del Die Mannschaft antes de optar por representar al país de su padre, igualó ayer a uno con un golazo de media distancia a los 64 minutos el partido que el equipo de las Barras y las Estrellas perdía por 1-0 desde los 5 minutos con una diana del portugués Nani.

El encuentro de explosivas emociones jugado en Manaos terminó 2-2 con un tanto de Portugal a los 94 minutos que dejó sin efecto la remontada de Clint Dempsey a los 81 minutos. Curiosamente, de un mano a mano entre Estados Unidos y Portugal durante el torneo de Corea del Sur-Japón 2002, salió el gol número
1.800 de la historia de la Copa del Mundo.

El autor del 1.800 lo marcó el defensor central Roberto Severo Beto, aunque de nada sirvió al equipo de las Quinas porque los estadounidenses terminaron ganando por 3-2. Otro portugués llamado Beto, el portero del Sevilla español, fue la víctima de Jermaine Jones al conquistar el gol 2.300.

Otra cifra redonda de goles en los mundiales, el 2.200, tiene la firma del holandés Arjen Robben y se registró el 6 de julio de 2010, en pleno torneo de Sudáfrica, cuando los oranje derrotaron en semifinales por 3-2 a la Celeste uruguaya.

El gol número 2.100 lo hizo el mexicano Javier Chicharito Hernández en la victoria del Tri por 0-2 sobre Francia el 17 de junio de 2010, también en Sudáfrica. Y el 2.000 salió de las botas del sueco Marcus Allback un 20 de junio durante el partido contra Inglaterra del Mundial de Alemania 2006 que terminó igualado 2-2.