La sorprendente Costa Rica y la poderosa Italia, que cuenta con toque y la pausa de su gran director de orquesta Andrea Pirlo, se enfrentan hoy en Recife en un encuentro clave del llamado ‘Grupo de la muerte’.

El juego será en el estadio Arena Pernambuco, escenario ubicado en el municipio de Sao Lourenco da Mata, suburbio de Recife. Este duelo podría convertirse, en caso de que no exista empate, en un pasaporte a los octavos de final para cualquiera de los 2. En su debut, Costa Rica sorprendió al vencer claramente 3-1 a Uruguay, mientras que Italia venció en su duelo de gigantes a Inglaterra.

La versión de Italia es parte de la renovación generacional y táctica que impulsa el estratega Cesare Prandelli, más cerca del fútbol de toque y presión contra el rival que del ‘catenaccio’, pero también con la energía de los contraataques de su figura Mario Balotelli.

Si los 35°C de la capital del estado de Amazonas fue motivo de queja de los italianos, en el Arena Pernambuco los esperan 30°C.

Esta fue la preocupación del volante italiano Daniele De Rossi; pero para el delantero centroamericano Cristian Bolaños la temperatura del nordeste de Brasil ‘complica a los europeos’ pero no a ellos, porque el clima en Costa Rica es similar.

Por diferencia de goles, los ‘ticos’ comandan este grupo y, por más que hayan sido tomados por ‘patito feo’ de la llave de campeones mundiales, irá por un lugar en octavos.

El equipo dirigido por el colombiano Jorge Luis Pinto tomará precauciones ante Italia: si bien ha rechazado el DT hacerle marca personal a Pirlo, la estrategia será no darle espacios al rival.

Costa Rica acudió a 4 mundiales y su mejor papel fue en Italia 1990, cuando llegó a octavos de final. Italia, en cambio, es una amenaza para Brasil, ya que la ‘azzurra’ tiene 4 títulos (1934, 1938, 1982 y 2006); y uno más igualaría a los anfitriones.

El meta y capitán, campeón mundial 2006, Gianluigi Buffon, el defensa Ignazio Abate y el mediocampista Thiago Motta serían titulares.

La tercera novedad en Italia sería la de Motta, nacido en Brasil y que partió a los 15 años a Roma, en lugar del rápido y habilidoso Marco Verratti, que actuó ante los ingleses.