La Comisión de Arbitraje de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) designó ayer a Daniel Salazar como el juez central para la final de vuelta a disputarse mañana (11:30) entre Liga de Quito y Emelec, en el estadio Casa Blanca.

La terna arbitral la completan Christian Lescano (línea 1) y Carlos Herrera (línea 2) y el cuarto juez será José Luis Espinel.

En lo que va de la temporada 2015, Salazar, de 40 años, ha dirigido 15 partidos, sacó 64 tarjetas amarillas, 8 cartulinas rojas y sancionó 7 penaltis.

Aunque no tiene escarapela FIFA, lleva seis temporadas como juez profesional de fútbol. Los números de Salazar en toda su carrera indican que dirigió 115 partidos, sacó 500 amarillas y 56 rojas, según el sitio web www.footballdatabase.eu.    

En 2011 fue el año que más partidos dirigió, un total de 23.    

Un dato importante a considerar es que en el presente campeonato Salazar decretó 4 penaltis a favor de Liga de Quito.

Una de las características del trabajo que realiza Salazar antes de los partidos es el estudio de los comportamientos de los jugadores y los técnicos.

Así lo hizo en septiembre pasado, cuando le tocó dirigir el encuentro entre Liga de Quito y Barcelona, en Casa Blanca. En esa ocasión reveló que había observado el comportamiento de Guillermo Almada en Uruguay, ya que en Ecuador no lo conocía. Para eso el juez ecuatoriano se apoya en videos de archivo y conversa en algunos casos con otros colegas.

Además, es un árbitro que se caracteriza por defender a los jugadores hábiles con la pelota y por sancionar con dureza a quienes pretenden fingir o simular faltas para perder tiempo.

Es consciente de que, como ser humano puede cometer errores, pero para eso trabaja todas las semanas para reducir el riesgo. “Es verdad que hemos estado en seminarios preparándonos, pero los errores son parte del fútbol; uno se prepara para no fallar, nos duele cuando nos equivocamos, esperamos cambiar esta situación”, dijo en septiembre pasado antes del encuentro entre Liga de Quito y Barcelona en la capital. (I)