Apenas con 21 años y una breve trayectoria en el balompié profesional, los defensas centrales Darío Aimar y Xavier Arreaga tienen la experiencia de haber compartido el camerino con un excampeón del mundo. Ambos zagueros describen el momento como “inolvidable” y coinciden en que las principales enseñanzas que les dejó fueron la sencillez y la entrega por el equipo.  

El exjugador de Liga de Loja recuerda más que nada la frase que les dijo antes de saltar a la cancha para disputar la Noche Amarilla: “A pesar de ser un amistoso, salgan a jugar como si se tratara de una final”. Arreaga reconoce que fueron muy pocos los instantes que permanecieron en diálogo con el astro. No pudieron entrenar con él como se había previsto, pero pudieron disfrutar de su compañía unos minutos antes de que empezara el calentamiento para enfrentar al San Martín de Porres.

“Es un hombre muy sencillo, pese a tratarse de una persona de tanta trayectoria llegó a nosotros con humildad, nos contó de él y siempre mantuvo una sonrisa amable”, destacó el otrora defensa del Manta FC.

Las mismas cualidades destacó el 10 de los amarillos, Damián Díaz, quien probablemente fue quien más gozó en lo futbolístico de la presencia del mediapunta portoalegrense. “Me hizo sentir muy cómodo a mí y al resto de compañeros. El mismo trato para con los jugadores grandes como ante los utileros del club”.

Díaz no pudo ocultar su emoción de recibir una asistencia de ‘Dinho’ y celebrar con él su doblete. El volante creativo sostuvo que fue tarea de todos “hacer lo mejor en la cancha para que Ronaldinho se sintiera bien y disfrutara del encuentro”, mientras que él “les transmitió ánimos y les dijo que quería quedarse jugando con ellos hasta el final del partido”.

La intención de ‘Ronnie’ no era ajena a la de Guillermo Almada, quien posterior al partido confesó que “no quería sacarlo”. “Me costó mucho hacer el cambio, porque nos estábamos deleitando mucho con él”, comentó el estratega, quien acotó que inicialmente había pactado con el jugador y su representante jugar 65 minutos.

“En muchas ocasiones nos quebramos por la previa, la presentación y más aún cuando Ronaldinho nos vino a dar un abrazo y nos dijo palabras de aliento”, acotó el DT en una entrevista radial ayer en la mañana.

Para Nicolás Asencio, coordinador deportivo del club, “todos ganaron” con la presencia de Ronaldinho en Barcelona, y destaca, sobre todo, la influencia del astro en lo anímico. “Si compartir un camerino con un excampeón del mundo no te motiva, probablemente no lo hará nada. La piel se te pone de gallina, los sentimientos se ponen a tope”, describió el exdelantero ‘canario’.

Asencio indicó que los colaboradores y la directiva buscaron no intervenir tanto durante el tiempo que ‘Dinho’ pasó con la plantilla. “Conversó con algunos, le preguntaban algo y no se negaba a responder. Con otros había compartido en México, y los conocía, y bueno, dejamos que estuviera más con los chicos y también le dimos su espacio, para no saturarlo”.

En la recta final hacia el torneo

Ayer Barcelona inició su semana de prácticas previo al arranque del campeonato ante El Nacional en Quito. La escuadra presentó dos novedades en el entrenamiento que inició a las 08:00: la lesión del volante Richard Calderón y el período de prueba del delantero José Cortez.

El ex Deportivo Quito sufrió una contractura en la Noche Amarilla y es duda para el fin de semana. Mientras que el atacante se encuentra dos semanas a prueba y el profesor Almada decidirá si se queda. (I)