Álex Aguinaga fue siempre el primer candidato para reemplazar a Paúl Vélez en el banquillo de Deportivo Cuenca. La dirigencia del club ‘morlaco’ se había planteado como objetivo traerlo de regreso al fútbol ecuatoriano y para eso, incluso, pidieron referencias a sus pares de Liga de Loja, club al que dirigió el ‘Güero’ en 2013.  

El aval fue positivo y ayer Aguinaga, de 46 años, fue anunciado como el nuevo estratega del cuadro azuayo, que se ubica en el décimo lugar de la tabla de posiciones con 9 puntos.  

Según Galo Cárdenas, presidente de la institución, el exselecionado nacional se ajusta al presupuesto y a lo que buscaba la dirigencia: un técnico que conozca el fútbol ecuatoriano, a los jugadores y al Deportivo Cuenca.

Aguinaga llegará este fin de semana a Cuenca y el lunes será presentado oficialmente. Hasta ayer se sabía que vendría solo con un preparador físico, aunque no trascendió su nombre. Lo que sí está acordado es que su asistente será el exfutbolista Pablo Marín, amigo de Aguinaga y con quien compartió varias concentraciones en la selección nacional.

El último club que dirigió fue el Correcaminos de México, pero fue separado del cargo por malos resultados.     

En redes sociales como Twitter y Facebook, los aficionados publicaron criterios distintos respecto a la contratación del ‘Güero’. Unos indicaron que es un buen estratega para el equipo rojo, pues se trata de un exseleccionado ecuatoriano, excapitán de la selección y un exmundialista; mientras que otros consideran que no ha logrado mayores cosas en el balompié nacional. Otros seguidores expresaron que en el Deportivo Cuenca se necesita mano dura, ya que -según ellos- el equipo tiene jugadores con calidad que pueden hacer un buen papel dentro del campeonato.

En ese sentido, desde esta semana el club realiza análisis periódicos de alcoholemia y visitas domiciliarias a la plantilla. Según los dirigentes, los deportistas no cumplen con su ‘entrenamiento invisible’ y no se están cuidando en su vida privada. (D)