Balda inicia su historia en el fútbol nacional
El portovejense Manuel Balda no lo pensó 2 veces cuando recibió la propuesta de El Nacional: jugar por primera vez en el fútbol ecuatoriano.
Su familia decidió migrar a España cuando él tenía 9 años. Sin embargo, allá pudo empezar su carrera. Y ahora su padre le insistió para que acepte la oferta del cuadro militar, pues le recordó que era uno de los clubes más grandes de Ecuador. Así, pasó de jugar en la Segunda División B de España al Campeonato Ecuatoriano.
El primer partido en su país natal lo disputó contra Deportivo Cuenca, en la segunda fecha del torneo, y su primer tanto llegó en la fecha pasada contra el Delfín de Manta, precisamente en el día de su cumpleaños. “Muy contento de cumplir años de esa manera: con el triunfo y un gol. En la jugada, perdí el balón y lo robé de nuevo. Vi al arquero un poco salido y le pegué”, contó el delantero ‘criollo’.
Reconoció que aún le cuesta jugar en la altura, pero de a poco se ajusta a lo que representa ese cambio, luego de jugar a nivel del mar en Barcelona. Su familia permanece en ese país por sus trabajos, mientras que él en Quito está en compañía de su esposa y un primo que reside en la capital. Su transferencia demoró en llegar y por eso se perdió la primera fecha del campeonato, pero ya mostró su potencial, sobre todo en su disparo de media distancia, en la presentación del equipo contra Aucas en el estadio del sur.
Esa es una de sus principales características y él prefiere jugar detrás del delantero centro, para tener más visión de juego y también habilitar a sus compañeros.
Por ahora no es considerado titular por el entrenador uruguayo Eduardo Favaro, quien mantiene como inicialistas a Marlon De Jesús y Michael Estrada. ‘Manu’, como lo conocen, no se desespera por su suplencia, mientras pueda aportar cuando entra al cambio.
Antes de regresar a Ecuador, después de 14 años en España, Balda se mantenía informado de la actualidad del fútbol nacional. Por internet seguía las incidencias del torneo y también de la Selección Ecuatoriana, a la que ansía llegar en algún momento de su carrera.
Es inevitable para el manabita que el acento español sea notorio cuando habla y aquello es objeto de algunas bromas por parte de sus compañeros. Sin embargo, él toma eso de la mejor forma y de a poco mejora su relación con sus nuevos compañeros.
Balda recorrió por varios equipos de Barcelona, donde residía con su familia. Estuvo en el Gramenet, con el que debutó en Segunda División, luego pasó por el Prat, Cornellá y finalmente en el Badalona.
En ese club disputó 29 partidos y marcó 5 goles en 2 períodos, lo que le sirvió para fichar por el fútbol griego, con el Panthrakikos de la Superliga de Grecia. Esa fue su primera experiencia en Primera, pero solo pudo jugar 8 encuentros, sin anotaciones.
El tanto contra Delfín fue el inicio de su historia en el fútbol ecuatoriano, en el que debutó con 24 años. (I)