Los goles “militares” llegaron de la zaga
De la zaga central salieron las dos anotaciones del triunfo de El Nacional sobre Emelec, ayer en el estadio olímpico Atahualpa. Javier Chila, de cabeza y tiro libre, puso su firma para terminar el invicto de los “eléctricos”.
En el inicio del compromiso, los locales fueron sorprendidos por la rapidez de la visita, sobre todo del atacante Walter Iza, que por la banda izquierda fue un verdadero dolor de cabeza para el lateral José Madrid.
Enner Valencia también puso su dosis de peligro sobre la valla del golero Bonard García. Sin embargo, con el transcurrir de los minutos fueron los “militares” quienes se adueñaron del esférico.
Controlaron el medio sector y desde ahí Cristian Lara generó los avances. Él mismo, tras sacarse a los defensas “eléctricos” ensayó un remate que fue desviado apenas por el arquero Wilmer Zumba.
Eso dio confianza al ataque “criollo”, que con los centros de Édison Preciado y cuando alcanzó Juan Anangonó, pusieron esperanza en la afición que asistió al sector de El Batán para alentarlos.
Pronto recibirían la recompensa. Un tiro libre ejecutado por Marvin Pita encontró el cabezazo certero y oportuno de Javier Chila a los 19’, ante la sorpresa de Zumba.
Fue la emoción contenida de todos los “rojos” que se desató en una marea en la que todos se confundieron en abrazos y felicitación al autor de la conquista que abrió el camino al triunfo.
Los “millonarios” reaccionaron de inmediato, y a través del movedizo “Conejito” Iza crearon zozobra sobre el arco local, donde Bonard lució nervioso y lo reflejó en sus erróneas salidas, que no fueron capitalizadas.
Iza fue el hombre más peligroso en el ataque visitante. Desbordó con rapidez y casi siempre superó al defensa Madrid. Sin embargo no tuvo la compañía certera en el argentino Eial Strahman, que lució falto de físico e ideas.
No fue el aporte que se esperó. Ni siquiera podía recibir y parar una pelota para cederla al compañero.
El Nacional disminuyó su ritmo de juego. Dejó que el adversario tome la iniciativa y apoyado en la suerte, logró que el marcador se mantenga con la mínima ventaja para los dueños de casa. Así se fueron al descanso.
En el reinicio de las acciones el “bombillo” volvió a intentar la igualdad, gracias a las facilidades que brindó en el arco García.
El capitán azul, Édison Méndez, ensayó un tiro libre, que desnudó nuevamente la equivocada salida del guardameta García, pero, como en el inicio, no hubo un visitante que esté oportuno para aprovechar y rematar.
Los “puros criollos” tuvieron chispazos de buen toque de balón, sobre todo con el ingreso de Fabricio Guevara, que dio mayor movilidad al medio sector.
Guevara en perfecta coordinación con Renato Ibarra hicieron soñar con el incremento en el marcador. Mas volvieron a desperdiciar los delanteros, mientras sus seguidores se tomaban de los cabellos sin entender como se falla con tanta facilidad.
Con el ingreso de Leandro Torres los “eléctricos” tuvieron más llegada. Sin embargo no hubo el compañero que lo apoye en la delantera.
Para suerte “militar” apareció nuevamente la figura del partido, Javier Chila. Esta vez con un potente remate de derecha, tras el cobro de un tiro libre, decretó la segunda anotación a los 70’. Nada pudo hacer el arquero Zumba.
Como en la primera conquista todos se unieron en un festejo singular, que incluyó el levantar la humanidad del goleador (1.80m) entre brazos.
Eso brindó la confianza necesaria para los locales, quienes se dedicaron a controlar el balón y a dejar que pasen los minutos. Hasta ensayaron jugadas personales de lucimiento que arrancaron aplausos de los presentes.