Regresar a su natal Buena Fe era su “misión” más reciente.  Después de que el fútbol se paralizó, Ligia Moreira pasó de todo para volver a su hogar, tras su participación en el fútbol español.

Al inicio de la pandemia del covid-19 se resguardó en el departamento donde residía en Oviedo, con sus compañeras de equipo: una paraguaya y una japonesa.

No había certeza de cuándo volvería a jugarse el fútbol femenino en España, pero se mantenía entrenando en casa. Sin embargo, a principios de mayo, la Federación Española de Fútbol decidió dar por terminados los torneos femeninos.

Moreira tenía contrato hasta el mes pasado con el Real Oviedo. Tuvo la oportunidad de embarcarse en un vuelo humanitario para volver a Ecuador y así lo hizo, pues ya no había sentido de permanecer en España.

Tras aterrizar en Quito, la futbolista tuvo que pasar dos semanas de cuarentena, antes de poder reunirse con su familia en Los Ríos. Esa es una medida obligatoria para todos los viajeros.

Primero lo primero. Estar en condiciones para compartir con los suyos era la prioridad y finalmente pudo desplazarse a su lugar natal.

Ahora debe resolver su futuro deportivo, que por la pandemia fue cambiante. Primero pensaba quedarse en Real Oviedo para el reinicio de la Liga; después su contrato terminó y el torneo se dio por terminado.

Con 28 años, la defensora es la única jugadora ecuatoriana que ha actuado en tres campeonatos diferentes. Colombia fue su primera salida al exterior, luego pasó por Brasil y finalmente dio el salto a Europa para jugar en España.

Su intención es mantenerse en el fútbol internacional; mejor aún si es en el español, porque siente que se adaptó bien al juego que se propone allá.

“Tuve mucha presencia en los últimos partidos que jugué con el Oviedo. Sentía que si se volvía a jugar lo haría como titular, pero ya no fue así”, contó.

Sabe que los contactos que consiguió permanecerán para un eventual regreso a España, pero también maneja opciones para actuar en la Superliga Femenina de Ecuador. Por ahora no existen nombres de posibles destinos para la defensora.

Según la Asociación Unidas por el Fútbol, la edición 2020 podría iniciar en agosto, por los contactos que han mantenido con la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).

Esa fecha es todavía tentativa, pero “Gigi” no agota las opciones para mantenerse activa en el segundo semestre del año. Si no es en el exterior, estará con seguridad en la liga local.

Juegue donde juegue, la selección nacional también es una prioridad. Ella quiere estar en el proceso que empezó con la brasileña Emily Lima, para tratar de llegar a un nuevo Mundial, tras estar en Canadá 2015.

Mientras tanto se mantendrá en forma, bajo las condiciones actuales. También retomará las actividades en la Escuela de Fútbol Moreira, que mantiene con su hermana Gissela, entrenadora de Emelec.

Podrán operar cuando sea permitido, para arropar a niños y niñas que estaban en la escuela hasta antes de la suspensión de actividades. (I)