Barcelona-Liga: con el mismo planteamiento, pero con diferente estrategia
¿Le funcionará a Liga jugar hoy cómo lo hizo el domingo pasado? Lo más seguro es que Pablo Repetto vuelva a utilizar el esquema 4-5-1 con el objetivo de acumular gente en el medio campo para complicar la elaboración de fútbol en Barcelona.
La prioridad alba será nuevamente juntar dos jugadores por las bandas para bloquear a Marcos Caicedo y Ely Esterilla, los jugadores favoritos de Guillermo Almada para desactivar los sistemas defensivos rivales.
Con su idea, Repetto, cortó los circuitos ofensivos amarillos y maniató a Barcelona al punto de ganarle campo y pelota hasta los 60 minutos del partido en que ya había sacado una ventaja de dos goles, que a la final bastaron para conseguir tres puntos.
A Almada, en cambio, la fórmula que le ha funcionado desde 2016 al punto de conquistar un título nacional y convertir al equipo en protagonista de la Copa Libertadores 2017, no le dio el resultado anhelado.
La receta no surte el mismo efecto cuando Caicedo y Esterilla sufren con una marca exigente o no están en su día, y es ahí cuando Barcelona busca, obligado, otras soluciones, ideas o intérpretes: Érick Castillo, Damián Díaz, Michael Arroyo o Jonathan Betancourt.
En Guayaquil la tarea para LDU (Q.) será más compleja porque los jugadores amarillos tendrán mejores arrestos físicos para cumplir con su objetivo.
La presión alta que identifica al cuadro de Almada será mayor y mejor en relación a la que logró efectuar en el estadio de Ponciano, donde las piernas no responden igual que en el llano.
La propuesta alba demandará una extenuante labor porque el conjunto local tiene el sentimiento de revancha a flor de piel y está obligado a ganar para no aflojar la punta del campeonato local, que justamente podría recaer en manos de la “U” en el caso de vencer.
El DT amarillo apostará también por el 4-5-1 y a que los rendimientos de los laterales y volantes carrileros aumenten en comparación con lo que mostraron en Casa Blanca.
Otra búsqueda del entrenador será que Matías Oyola y Gabriel Marques vuelvan a ser los constructores de juego desde la primera línea de volantes.
La fusión de esos funcionamientos otorgará protagonismo e importancia a Castillo y Juan Ignacio Dinenno, quienes en Quito no fueron tan determinantes pese a correr mucho y posicionarse constantemente para ser habilitados.
Las estrategias no variarán o tendrán ligeros cambios en ambas escuadras, la diferencia pasará por el rendimiento individual de los futbolistas.
En Quito, los integrantes del cuadro blanco sacaron provecho de la altura y levantaron su nivel con una actitud propia de un partido histórico, donde Fernando Guerrero y Hernán Barcos asumieron el liderazgo con calidad.
En el Monumental, el Ídolo será más intenso y si el elenco de Repetto no está bien concentrado y ordenado, los futbolistas canarios generarán ventajas claras para anotar.
Podríamos ver a un Barcelona proponiendo verticalmente y a una Liga esperando para protegerse y salir a la contra con los hermanos Julio, Guerrero y Barcos.
Cuando las fórmulas son las mismas, la tónica y el resultado del partido dependerá de los ingredientes que agreguen los actores al espectáculo. (O)