El fútbol femenino nacional continúa en la lucha para que la realización del certamen 2020 se mantenga en pie, luego de que tres equipos decidieron que no participarían para “precautelar” la salud de las futbolistas.

Sin embargo, para los que sí quieren participar, la decisión les pareció apresurada y en esa misma línea se expresó el presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), Francisco Egas.

“Si se puede jugar un campeonato de hombres, se puede el de mujeres. Y si no se puede el uno, no se puede el otro. Más allá de criticar las actitudes de Barcelona o Emelec, debemos tener una actitud conciliadora”, dijo Egas en una entrevista en Radio La Red.

Su postura pública devuelve la calma, en parte, a las protagonistas, que confían en que podrán jugar la Superliga, si las condiciones son favorables en el marco de la pandemia de covid-19.

“Yo me siento muy agradecida, porque esa es la actitud que debe tomar el ente que regula nuestro fútbol. Hay que entender que es un tema de equidad y hay una obligación de reanudar ambos torneos, porque la pandemia nos afecta a todos”, dijo Fernanda Vásconez, fundadora y futbolista del club Ñañas.

Ella recordó que la postura del actual directorio de la FEF ha sido el de promover el fútbol femenino y ha sido notorio. Primero con la realización de la primera Superliga y también con la disputa de la Copa Libertadores Femenina en Ecuador, por primera ocasión en la historia.

Ñañas fue uno de los primeros clubes en reaccionar, cuando Barcelona, Emelec y Guayaquil City expresaron su deseo de no competir en la Superliga 2020.

Enviaron una carta a la FEF, que aún no ha sido respondida, con varios puntos entre los que se cuentan la participación activa de los equipos en la toma de decisiones o que se esclarezcan los rubros por derechos de televisión y cuándo llegarán a los clubes.

Edisson Méndez, entrenador de Carneras de Cuenca, también se mostró satisfecho con esa postura. “El pronunciamiento de los tres equipos fue apresurado, no era el momento de hacer esas declaraciones; primero es necesario dialogar y buscar soluciones”.

Mientras que Wendy Villón, DT campeona con Deportivo Cuenca de la Superliga 2019, se mostró optimista de que el certamen tenga normalidad.

“Es tranquilizador escuchar esa posición. Se ha avanzado en el fútbol femenino y sabemos que falta mucho, pero se ha recorrido un camino importante. Hay que continuar con la lucha por el fútbol femenino”, dijo.

La amenaza del covid-19
El sindicato mundial de futbolistas FIFPro cree que hay que prestar atención al fútbol femenino en esta situación generada por la pandemia mundial del coronavirus, que amenaza seriamente su actual situación de “crecimiento y evolución hacia un sector fuerte y viable”.

La FIFPro presentó un documento titulado: “Covid-19: Implicaciones para el fútbol femenino profesional”.

 En este, recuerda que la “ausencia de mecanismos de protección básica para las trabajadoras y de normas globales en el sector para las condiciones laborales en el fútbol femenino también implica que los medios de vida de las jugadoras son extremadamente vulnerables”.

El documento hace hincapié en la colaboración entre todas las partes “para mitigar los daños producidos por el coronavirus, dando prioridad al bienestar físico y mental de las jugadoras”. (I)