Aucas terminó su festejo con sus hinchas en El Arbolito
Aucas esperó sus 77 años de vida institucional para ganar por primera vez un campeonato nacional. Sus sueños empezaron en el parque El Arbolito, en el centro norte de Quito, donde sí consiguió títulos, pero solo provinciales (Pichincha).
Hasta ese lugar llegó la caravana que partió desde el estadio Gonzalo Pozo Ripalda, su casa, el sitio en el que ganó el título tras superar a Barcelona en las finales. De allí partió en un bus de dos pisos junto con miles de hinchas que desafiaron la gélida noche capitalina, para recorrer primero la Tribuna del Sur y luego el parque.
Los jugadores mostraron orgullosos el trofeo de la LigaPro, mientras sus seguidores, muchos quizás aún incrédulos por lo que vivieron, ondeaban sus banderas y gritaron el tradicional: "Y dale A, y dale A... y dale Aucas dale A".
En el recorrido no solamente estuvieron personas adultas mayores. También había jóvenes, adolescentes y hasta niños. La idolatría de Aucas en Quito seguía vigente, así estaba demostrado, con esa gran asistencia de aficionados, a altas horas de la noche y en domingo.
A muchos no les importó saber que debían madrugar para ir a trabajar o a estudiar, porque esta sensación de éxito nunca la habían sentido. Gritar campeón no tenía precio y nadie podía predecir que se pudiera repetir. Por ello, para los hinchas valía la pena este esfuerzo de vitorear a sus ídolos, quienes devolvieron los gestos con sus manos alzadas y exhibiendo el codiciado trofeo.
Luego de interactuar y cantar la principal barra auquista, los jugadores volvieron al estadio para por fin tomar unas merecidas vacaciones, tras una brillante campaña.
Y así cierra Aucas una brillante temporada, haciendo historia en compañía de sus hinchas, que esperaron toda su vida en un momento de gloria... en el parque de El Arbolito, donde nació esa ilusión pic.twitter.com/ukAppqPP2c
— Fanático (@FanaticoEc_) November 14, 2022