Un error de José Luis Quiñónez, que intentó bloquear un centro de Robert Flores y el balón le pegó en su brazo, dejó prácticamente abierta la llave en la Copa Sudamericana entre Emelec y River Plate de Uruguay.

El ‘Ballet’, que jugó un partido dinámico en el medio campo, derrotó por 2-1 al cuadro ‘charrúa’, que con el gol de Michael Santos (74’) quedó con vida en el certamen. Los tantos del conjunto ‘eléctrico’ fueron de Marcos Mondaini y Miller Bolaños, a los 27 y 48 minutos, en ese orden.

El DT Gustavo Quinteros sorprendió con su alineación al jugar sin ‘9’. Luis Miguel Escalada y Emmanuel Herrera se quedaron en el banco. Y los hombres de ataque azul fueron Mondaini, Bolaños y Ángel Mena.

Esta tripleta hizo un buen trabajo, dando más movilidad al equipo que fue incisivo en los extremos. Mondaini en el primer tiempo y Bolaños, en el segundo, marcaron los tantos del ‘Bombillo’.

Todo iba bien en el cuadro ‘eléctrico’: jugaba mejor, llegaba con más claridad al arco rival y dejaba tocar poco el esférico al rival.

Sin embargo, el ‘Pulpo’ Quiñónez metió mano a los 73’ y el juez dio tiro penal. Al cobro fue Michael Santos, que venció al portero Esteban Dreer.

Tras el gol, los ‘charrúas’ se quedaron con 10 jugadores ya que Claudio Herrera le pegó un codazo al paraguayo Fernando Giménez y el árbitro no dudó en expulsarlo. Emelec no pudo aprovechar esa superioridad numérica para aumentar el marcador y ganó por la mínima diferencia un cotejo en el que fue amplio dominador.

El partido de vuelta será el 25 de este mes en Montevideo.