El trabajo de los tatuadores en Argentina se duplicó tras el título mundial
Los tatuadores redoblan el trabajo en Buenos Aires. Algunos fanáticos cambian las tradicionales serpientes o calaveras por la cara del astro Lionel Messi o por el trofeo de la Copa del Mundo ganada por Argentina en Qatar. La fiebre mundialista deja su marca en la piel.
"Las próximas dos semanas son todos tatuajes relacionados con el Mundial. Algunos tenían turno para hacerse serpientes o calaveras y lo cambiaron por Messi o la Copa. Tengo dos o tres turnos por día ya pautados", cuenta a la AFP Esteban 'Tebi Cobra' Vucinovich.
Según este tatuador del barrio capitalino de Palermo, el trofeo de la Copa del Mundo es lo que más eligen para tatuarse, pero también a Messi, las frases que el capitán de la Albiceleste dijo durante el Mundial, y también al arquero Emiliano 'Dibu' Martínez, héroe por sus atajadas de penales, especialmente en la final ante Francia (3-3 en 120 minutos, 4-2 en la definición por penales).
También los campeones se tatuaron, como Angel Di María, que ahora lleva en el cuádriceps de la pierna derecha la imagen de la Copa que alzó en Catar.
"En la piel para toda la eternidad. Muchas gracias amigo. Lo habías dicho cuando hicimos la Copa América, la otra pierna se estaba guardando para este momento. Estaba escrito. VAMOS ARGENTINA", escribió el 'Fideo' en Instagram junto a una fotografía con su tatuador.
¿Los motivos de esta fiebre? El agradecimiento a la 'Scaloneta' por el tercer título mundial para la Albiceleste después de Argentina-1978 y México-1986, el reconocimiento al esfuerzo y el deseo de no olvidar justifican quienes deciden tatuarse.
"Me tatué a Messi en señal de agradecimiento. Representa no solo lo que es Messi sino lo que es este equipo que nos dio la tercera copa mundial, lo que fueron todos estos años de esfuerzo y llegar al objetivo que fue la Copa", afirma Nicolás Rechanik, un empleado del Estado.
En su pierna izquierda llevará para siempre a un Messi vestido con camiseta albiceleste que la selección usó en el Mundial de Catar, besando la Copa dorada.
"Llevar a Messi en la piel, es llevar a uno de los dos más grandes futbolistas de la historia, --el otro, Diego Maradona, también lo tengo tatuado--. Es una representación cabal de lo que es el fútbol argentino y lo que es la argentinidad para todos nosotros", sostiene.