Se impuso en 10 de los 19 Grandes Premios DE LA TEMPORADA
Hamilton y Mercedes 'aburrieron' en Fórmula 1
El abrumador dominio del británico Lewis Hamilton y de la escudería alemana Mercedes por segundo año consecutivo provocó que el dueño de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, haya calificado recientemente la temporada pasada de “aburrida”.
“El dominio de Mercedes es tan fuerte que un buen número de personas mira la salida de un Gran Premio y después apaga la televisión, porque Mercedes convierte las carreras en aburridas”, se lamentó Ecclestone.
Las cifras de 2015 (y las de 2014) dan la razón a Ecclestone: Hamilton se impuso en 10 de los 19 Grandes Premios y su compañero en Mercedes, el alemán Nico Rosberg, ganó otras seis carreras, las tres últimas en la final de temporada, cuando el británico ya se había proclamado campeón del mundo.
Si en 2014 había sido el australiano Daniel Ricciardo el único que había logrado romper el monopolio de la marca germana, con tres victorias para Red Bull, en la última temporada fue el alemán Sebastian Vettel, 4 veces campeón del mundo, el que se entrometió en la lucha de los dos pilotos de Mercedes.
Esas tres victorias de Vettel supusieron además el regreso a lo más alto del podio de Ferrari, el equipo más popular de la parrilla, pero que había encadenado varias temporadas decepcionantes.
Podría decirse, no obstante, que Rosberg y Vettel tuvieron que contentarse con las migajas dejadas por un insaciable Hamilton.
Además de las 10 victorias, el campeón del mundo sumó seis segundos puestos y un tercero. Es decir, subió al podio en 17 de las 19 carreras disputadas. Solo en Hungría, con un quinto puesto, y en Singapur, donde no puntuó, Hamilton se quedó sin descorchar el champagne.
Hamilton no solo dominó los días de carrera, en domingo, también fue el más rápido en los entrenamientos oficiales de los sábados en 11 ocasiones (de 19) y partió así desde la primera posición de la parrilla de salida, logrando una gran ventaja en los Grandes Premios.
Hamilton sumó 381 puntos para proclamarse campeón del mundo por tercera ocasión en su carrera (2008, 2014 y 2015), igualando a leyendas de la disciplina como los brasileños Ayrton Senna y Nelson Piquet, al australiano Jack Brabham y a su compatriota Jackie Stewart.
Rosberg se quedó en ‘solo’ 322 puntos y nunca fue un rival real para su compañero, con el que supuestamente está enemistado, lo que podría llevar a Mercedes a desprenderse de uno de los dos. Vettel mantuvo el tipo con 278 unidades.
El resto de la parrilla se quedó a años luz. El finlandés Kimmi Raikkonen, por ejemplo, fue cuarto con 150 puntos y solo tres podios en toda la temporada.
Si la cara fue Mercedes, la cruz fue McLaren-Honda. El reencuentro del constructor británico con el gigante japonés se convirtió en un fiasco, sumando más abandonos y ceros que puntos obtenidos.
A pesar de contar con una pareja de pilotos experimentada, el español Fernando Alonso y el británico Jenson Button, ambos campeones del mundo, los problemas en el motor Honda arruinaron la temporada.
Un quinto puesto de Alonso en Hungría y un sexto de Button en Estados Unidos fueron los resultados más destacados de uno de los equipos más legendarios de la Fórmula 1.
En el lado positivo de la balanza, además de Mercedes y de los signos de recuperación de Ferrari, apenas hubo alguna señal de cierta esperanza para el futuro, salvo, quizá, la irrupción de Marx Verstappen.
El piloto holandés se convirtió, con 17 años, en el más joven en disputar un Gran Premio y al volante de su Toro Rosso completó una temporada muy digna, con dos cuartos puestos (en Hungría y Estados Unidos) como resultados más destacados y 49 puntos en el campeonato (12º de 22 pilotos).
Otra buena noticia fue que el mexicano Sergio Pérez tuvo una meritoria temporada con su Force India, acabando tercero en Rusia y noveno en el campeonato.
La temporada dio para poco más, lo que está llevando a un creciente desinterés por la disciplina, por lo que Ecclestone y los dirigentes del campeonato estudian medidas para revitalizarla.
Una de ellas es que Pirelli pondrá en manos de cada equipo tres juegos de neumáticos en 2016 (en lugar de dos como en las últimas temporadas), con lo que se espera que las escuderías puedan diversificar sus estrategias de carrera.
Otra de las novedades en 2016 será el regreso a la Fórmula 1 de Renault, después de que el constructor francés, con el que Alonso fue campeón en 2005 y 2006, comprara Lotus. El tiempo dirá si los cambios aumentan la competitividad en la disciplina. “Los espectadores no deben saber antes de la salida de un Gran Premio quién lo va a ganar”, resume ‘Bernie’. (I)